EUSKALTEL
El Euskaltel aterriza en Bilbao tras el último viaje de su historia
Tras correr el Tour de Pekín, el director deportivo, Álvaro González de Galdeano, lamenta el desenlace: “Aún no nos creemos que haya sido la última carrera".
El Euskaltel aún existe como equipo ciclista, hasta que acabe el año, pero puede decirse que ayer por la noche acabó su periplo, que ha durado 20 años. La participación en el Tour de Pekín echa al persiana al equipo naranja, que aterrizó en Euskadi con caras de profundo pesar. "Somos conscientes de que esto se ha acabado, pero aún no nos hacemos a la idea. Aún no nos creemos que haya sido la última carrera después de tantos años en el pelotón", sostiene el director deportivo, Álvaro González de Galdeano. En el avión de regreso, la expedición coincidió con Beñat Intxausti, que ve las cosas de otra manera tras ganar en China y contar con la continuidad del Movistar, pero se solidariza con sus compañeros. “Veníamos en el avión hablando de lo triste que es todo esto. Mucha gente se queda en la calle y es injusto. Aunque a mí no me ha tocado, me pongo en su lugar”.
Galdeano hizo un terrible paralelismo: “Es como cuando hay un fallecimiento, nos acordaremos de él cuando ya no esté, nos daremos cuenta después. Imagínate cómo era el ambiente en el equipo de vuelta. Muy triste". Los ciclistas celebraron, por lo menos, que el final haya sido digno y que ninguno se dejara ir. Cada uno intenta buscarse la vida. Sicard podría encontrar acomodo en el Europcar. Astarloza se retira tras doce años de profesional: “Ha sido la decisión más difícil que he tenido que tomar hasta el momento, pero voy a cumplir 34 años y creo que es el momento de cambiar de estilo de vida. Me ilusiona empezar una nueva vida, al margen de la competición”. Ahora falta por ver qué acomodo encuentran promesas como Lobato y Bravo. Al resto del personal profesional del equipo no le espera, en gran medida, un futuro muy halagüeño".