"Me siento muy querido y arropado por los tifosi"

¿Cómo afronta este Giro tras conquistar el de 2008 "recién aterrizado de la playa"?

A esa carrera llegué de rebote, sin apenas preparación y sin conocer absolutamente nada del trazado. La superé día a día. Ahora, me he preparado específicamente y vengo a disputarla con plenas garantías.

Cualquiera de sus rivales asegura que Contador es el máximo favorito, pero usted señala a otros.

Veremos dónde deja la carretera a cada uno. Sé que me controlarán y también deberé vigilar. Pero algunos se juegan mucho más que yo, como Nibali o Scarponi, que corren en casa, o Menchov y Sastre, que no participarán en el Tour.

¿Tenía ganas de regresar a este país?

Sí, la gente es maravillosa. Aquí respetan enormemente a los ciclistas, sean de donde sean. En la edición de 2008 me sentí muy querido y arropado por los tifosi.

¿Espera lo mismo esta vez pese a enfrentarse a Nibali?

Claro, se trata de una afición envidiable. He sentido el respaldo y el cariño del público en todas las pruebas en las que he participado este año.

¿Puede centrarse en la bicicleta cuando todavía no sabe si será sancionado o no?

Sí, siempre defenderé mi inocencia, no hay impedimento para competir y tengo una fe ciega en el equipo de abogados y colaboradores que me rodea.

¿Le preocupa vencer y que luego le descalifiquen?

Deseo que el tema se solucione de la mejor manera posible. No he pensado en ello, y tampoco está claro que eso pueda suceder.

¿Piensa más adelante? ¿En el próximo Tour?

La futura planificación y lo que tenga que ocurrir continuará su curso al terminar el Giro, así que sólo me fijo en el 29 de mayo, cuando concluirá esta ronda.

¿Le ha dado tiempo para seguir alguno de los cuatro Clásicos?

Al estar muy concentrado en los entrenamientos, solamente pude ver uno entero, pero conozco la polémica que han levantado. Los dos son grandísimos equipos, aunque quizá el Barcelona esté más cuajado y equilibrado.

Las relaciones entre los jugadores de Madrid y Barça de la Selección están más tensas ahora. ¿Le pasó lo mismo con Andy Schleck tras el incidente de la cadena del pasado Tour?

No, mantenemos la amistad. En la Flecha Valona coin­cidimos y charlamos tranquilamente durante un buen rato. Además, son deportes distintos. Aquí la gente no se identifica más con uno que con otro, se les respeta por igual. En el fútbol sí sientes más los colores.

¿Podrá el ciclismo recuperar la atención de la época de Indurain?

Ojalá. Hemos tenido nuestros problemas y también hay que destacar que en España se gana ya casi todo en cualquier cosa. Así resulta más complicado focalizar esa atención, con Rafael Nadal, Fernando Alonso, la Selección de fútbol campeona del mundo, las motos

¿Qué sabe de la Unificación de Italia?

Poca cosa, que se celebra el 150 aniversario y que por eso Visconti (el actual campeón italiano) llevará el dorsal 150.