¿Qué opina del árbitro elegido por la RFEC y sus abogados?
Nada. Estoy muy concentrado en las carreras. Trato de disfrutar en ellas y lo estoy logrando. No me ocupo del TAS. Para eso están mi hermano Fran y mis abogados.
¿Cuáles son sus sensaciones sobre el caso?
No me sirve de nada preocuparme. Yo no puedo hacer nada que no sea tratar de hacerlo lo mejor posible en cada competición que participo. En este sentido estoy muy bien anímicamente. Mis resultados están siendo muy buenos y, tanto en Murcia como en Cataluña, he recibido mucho apoyo de la gente.
También de Pinto.
El nombramiento de Hijo Predilecto por parte de mi ciudad (el lunes) me ha cargado las pilas. Es un orgullo ser el primero al que se le concede ese título por parte de la gente de la ciudad en la que nací, crecí y sigo viviendo.
¿Cómo afronta la Vuelta a Castilla y León?
Con muchas ganas. Estos dos últimos días estoy un poco constipado, pero espero que no me cause problemas.
¿Le gusta el trazado?
Es el que hay. Como siempre tiene una llegada en alto y una contrarreloj. Conozco bien la subida a la Laguna de los Peces. Ya subimos allí en 2008 y me tocó ayudar a Leipheimer. Es una ascensión sencilla. No creo que provoque muchas diferencias.
¿Y la crono de Zamora?
Son sólo 11,2 kilómetros, la mayoría entre calles. No es que me vaya mal, pero tampoco aquí las ventajas serán amplias. Será una carrera muy ajustada.
