Ciclismo | Mundial de Melbourne
Gárate: "Aspiramos a todo y a nada porque en una carrera de un día puede pasar de todo"
Gárate también señala que es un Mundial "más blando que en los dos últimos años".
El capitán de la selección española de ciclismo, Juanma Gárate, que este fin de semana liderará al equipo en la prueba de Ruta del Mundial de Australia, se muestra cauto con respecto a las posibilidades de victoria, aunque señaló que Oscar Freire se encuentra "muy bien".
"Aspiramos a todo y a nada porque en una carrera de un día no deja de influir el factor suerte. Tenemos buenos corredores, nuestro líder está muy bien, pero una carrera es una carrera y podemos tener esperanzas, pero hay que tener los pies en el suelo y estar con calma. No podemos empezar a celebrar las cosas ya porque puede que luego se nos vaya todo al traste. Son 260 Kilómetros y puede pasar de todo, pase que hay que estar tranquilos", indica en declaraciones a 'rfec.com'.
Asimismo, el capitán español recordó que "el año pasado se llegó en muy buena situación a los últimos kilómetros" y que "se tomó una decisión que no era mala". "Pero al final no se remató y no hubo suerte", lamenta, por lo que en esta ocasión confía en mantener controlada la carrera.
"Tenemos la baza de Oscar, una baza muy clara, pero luego tenemos hombres como Luis León y Samuel, y jugaremos nuestra estrategia, pero son dos corredores fundamentales para el equipo porque al final, cuando se produzcan los ataques, que van a llegar, hay que seguir uniendo la carrera de cara a que se llegue en un grupo reducido para que Oscar pueda rematar", explica el corredor vasco.
Gárate asegura que Freire está "tranquilo", con una "pedalada mucho mas suelta y fluida que en la Vuelta". "Le he visto como al mejor Oscar cuando realmente está bien. Está muy motivado porque sabe que puede ser su Mundial, aunque no le presiona mucho el hecho de hacer historia. Cuando está bien de forma esta seguro de sí mismo", apunta.
"Cuidado con Cancellara"
En cuanto a los rivales, Gárate cree que los australianos, que "corren en casa y tienen gente que esta muy bien", serán sus principales rivales, ya que "se van a tener que dejar ver y para ello van a tener que controlar también" la carrera, al tiempo que recuerda las opciones del suizo Cancellara.
"Hay que tener mucho cuidado en los 4 últimos kilómetros con Cancellara, porque no llegan a ser llanos del todo, a veces pica un poco para abajo y otras para arriba, es muy ancho y ahí un corredor en la última vuelta, cuando el grupo está ya reducido, puede ser que te haga mucho daño porque ya no hay tantos gregarios para poder echar abajo una fuga de ese calibre", explica.
Para evitar sorpresas de última hora, el capitán del equipo confía en Luis León Sánchez y, sobre todo, en Fran Ventoso, "que está muy bien y en esa parte final le veo pegado a Oscar porque es quien le tiene que guiar un poquito para entrar bien en el sprint", puntualiza.
"El viento jugará un papel decisivo"
Gárate considera que la Ruta se puede dividir en "tres partes", con una primera fase de 80 kilómetros "llanos" en los que el viento jugará un papel decisivo, ya que es una zona donde "entra mucho aire de costado, un aire perfecto para romper el grupo por lo que, todas formas, hay que estar muy atentos".
"Somos una selección que nos sabemos mover muy bien con el aire. Corredores como Erviti, Plaza, Barredo o yo mismo, tenemos que estar ahí y llevar a los líderes hasta el circuito los más protegido posible. Es una fase donde se puede perder el Mundial más que ganarlo, no creo que nadie lo gane ahí", subraya el ciclista de Rabobank.
Tras el paso por Geelong, hay "una fase en las primeras vueltas del circuito donde se verá un poco quién viene con la intención de coger la responsabilidad de la carrera". "Ahí hay que ser un poco fríos, mantener la calma y esperar que sean otros lo que se echen la carrera a la espalda", añade.
Gárate también señala que es un Mundial "más blando que en los dos últimos años". "También es un trazado que favorece la labor de persecución al grupo. Este año hay calles anchas donde un grupo puede trabajar bien", asegura.
Finalmente, La prohibición del pinganillo obligará a Gárate a tomar las riendas del equipo en situaciones comprometidas de carrera, aunque está preparado para asumir responsabilidades.
"Creo que hasta ahora con los pinganillos podíamos consultar o compartir ideas con el director, pero a partir de ahora salimos con una idea inicial que la planeamos en el hotel, aunque luego la cosas muchas veces van cambiando y hay que tomar decisiones ''in situ'' y en está ocasión me va a tocar a mí y para eso estoy, para tomar la responsabilidad de decisiones puntuales según vaya la carrera", concluye.