Contador combatió el calor con 35 bidones

Ciclismo | Tour 2010

Contador combatió el calor con 35 bidones

Contador combatió el calor con 35 bidones

reuters

Bebió unos 15 litros: "Y no paré de echarme agua"

Impresionante calor". Alberto Contador definía así las sensaciones que le había dejado la etapa post-alpina. Tras una ducha en el autobús del Astaná, una breve charla con los compañeros, y antes de marcharse en coche, donde aprovecharía para comer, hasta el hotel, el segundo clasificado del Tour atendió a los medios de comunicación.

A falta de interés por la general en la llegada a Gap, de Contador importaba saber cómo había pasado el día de más calor en este Tour. "Suerte que no hemos ido muy rápido. De todos modos estar más de cinco horas sobre la bicicleta supone un desgaste enorme. No ha sido una jornada de transición aunque no haya habido cambios en la general", apuntó.

Contador dio detalles de las salvajes condiciones de la jornada. "Mi cuentakilómetros ha llegado a marcar 47 grados de temperatura. Me he pasado el día echándome agua por encima y bebiendo". La hidratación en estos casos es básica para no perder una cantidad de sales minerales que haga peligrar la condición física de los corredores. "He bebido fácilmente 15 litros de líquidos, unos 35 bidones", dijo Alberto. Para hoy, ya en el valle del Ródano, las previsiones apuntan a un bochorno sofocante. "No será tanto como en Argentina. Allí hemos corrido con 45 grados", señalaba David de la Fuente, compañero de Contador en el Astaná, siempre sonriente pese a la que estaba cayendo.

La recuperación.

Se dice en el pelotón que el castigo de la canícula va a hacer estragos cuando lleguen los Pirineos. Cuesta dormir por la noche y durante las etapas no hay ni un momento de descanso. "Así las etapas se hacen muy largas", piensa Contador, que ayer vivió el primer día de su duelo mano a mano con Andy Schleck. El luxemburgués reconoció estar "feliz" corriendo de amarillo por Francia.