Ciclismo | Tour de Francia
Llega la montaña: todos contra Contador y Astaná
Hoy, final en un alto de 2ª. "Empieza el Tour", dice Alberto.
Rico en montaña. Este Tour sube más que llanea y desde hoy se va a empezar a notar. La carrera asciende hasta la estación del Rousses, inédito final en el Alto Jura, a cuatro pasos de los Alpes que llegarán mañana con la ascensión a Morzine-Avoriaz (1ª categoría) previo paso por el Col de Ramaz, puerto temido por los favoritos que han estado en los Alpes inspeccionando el terreno. A Rousses se asciende por un segunda categoría (Lamoura) que tiene su cima a cuatro kilómetros de la meta.
"Empieza el Tour", dice Alberto Contador. Lo hace con Cadel Evans y Andy Schleck por delante y con todo el Astaná en plena estragegia. "Estoy para ayudar a Alberto en la montaña y en donde haga falta", apunta David de la Fuente, uno de los cinco mosqueteros que hablan español en el equipo kazajo. "El Tour más duro empieza ahora", añade Contador que, de todos modos, piensa que "no se van a marcar grandes diferencias" en los Alpes. "No sé cómo estaré pero mis sensaciones son buenas". Nadie se va a querer perder la jornada, ideal para una fuga y "un cambio de líder", como cree Samuel Sánchez. "El domingo será muy animado", desafía Lance Armstrong. ¿Qué plan tendrá?
Cancellara va a ayudar a Andy
Fabian Cancellara no se va a volver loco por retener el maillot de líder. El suizo y el Saxo Bank dejarían irse a una escapada larga para centrarse en ayudar a Andy Schleck en el primer contacto con la montaña. El luxemburgués ha pasado tres días tranquilo en el centro del pelotón y sin grandes agobios.
La táctica "anti látigo" de Astaná
Cuatro compañeros de Contador (Tiralongo, De la Fuente, Hernández y Navarro) llegaron ayer muy rezagados a la meta, casi los últimos a 8:45 de Cavendish. "En los últimos diez kilómetros se dejan ir para evitar caídas, o los látigos a 60 km/h del sprint. Debemos guardar las fuerzas para la última semana", explicó Contador.