"Ha quedado claro que el líder del Astaná soy yo..."

Este triunfo es un premio a qué, Alberto

Al trabajo de mucho tiempo. Poder conseguir el maillot amarillo en la carretera es un honor y sabe mejor que aquel de 2007. Para mí ser líder aquí y ganar una de las etapas reinas es lo máximo que se puede conseguir. La resistencia de un hombre como Lance Armstrong que ha ganado siete veces esta carrera hace que tenga más valor.

¿Es su día más feliz como ciclista?

No. El más feliz fue cuando volví a subirme a una bicicleta en una carrera en el Tour Down Under de Australia. El año anterior casi pierdo la vida en la caída de la Vuelta a Asturias. En esa carrera también gané la etapa reina.

¿"La ley del más fuerte" sería un buen titular para la crónica de su triunfo?

Si es un buen título lo sabrán ustedes Yo lo que sé es que lo intenté con todas mis fuerzas.

¿Cómo perfiló el ataque?

Pensaba en demarrar entre el kilómetro 4 y 5 de la ascensión, pero lo hice antes. El Saxo Bank marcó un ritmo muy alto y cuando me di cuenta de que sólo cuatro o cinco corredores seguían mi rueda decidí arriesgar.

Se vio con fuerzas.

Todos estos días me he visto con fuerzas. Tenía muchas ganas de que llegara esta etapa. Desde primera hora vi que podía ser mi día. Probé y me salió bien. El apoyo de la gente también fue clave. Se volcó en la carretera. Para ellos va esta victoria.

¿No era demasiado lejos para atacar?

Era peligroso, pero también la única manera de sacar diferencias.

Al final fueron grandes.

Saco una ventaja relativamente importante a los rivales. Valió la pena arriesgar.

Se dijo que la carretera pondría a cada uno en su sitio. ¿Quién es el líder de Astaná ahora?

Los segundos que he sacado son suficientes para decir ahora que la baza del Astaná soy yo.

Dice Armstrong que usted ha sido el más fuerte y que se compromete a trabajar para que pueda mantener el maillot.

Es un honor que lo diga y un placer escuchar esas palabras. Seguro que el equipo trabajará a tope para que podamos conservar este amarillo. No lo quiero perder. He dado un paso importante.

¿Qué se siente cuando ataca al que fue su ídolo?

Nada especial. Armstrong ha sido mi ídolo, pero no pensé en nada en ese momento, solamente en ir a tope hasta la meta. Lance puede hacer un papel importantísimo para el Astaná.

¿Ha ganado el Tour?

Rotundamente, no. Queda la tercera semana y muchos adversarios van a tener fuerzas para moverse. Los hermanos Schleck han demostrado que las tienen.