"Voy a salir como Piolín, todo de amarillo y con el dorsal 1"

¿Irá de amarillo?

Soy como Piolín, que sólo hay uno. Y con el dorsal 1, que bien me lo gané el año pasado. El Tour me dará el kimono amarillo para la contrarreloj. Es bonito ir de amarillo en el Tour.

De blanco, además.

Se nota que soy del Real Madrid. El color del Cervelo es el negro pero cambiamos a blanco para resistir mejor el calor.

¿Quién es su favorito?

Yo. Quién voy a decir si no. Si no me pongo yo, mal vamos.

Lleva encima dos grandes triunfos en el Giro

En el Giro cambié por primera vez mi manera de pensar. Acudí para intentar ganarlo pero, una vez que vi que no podía, quise las etapas porque mi palmarés estaba un poco seco, la verdad Necesitaba que el Cervelo cogiera experiencia.

¿Es mejor este Cervelo o su CSC del año pasado?

El CSC era un gran grupo. De los de ahora, en el Cervelo, sé que van a dar todo lo que puedan y más.

Se le nota tranquilo.

Si a esto le llama tranquilidad (le rodean no menos de 30 periodistas)... Me gusta que se hable de mí por lo que hago sobre la bicicleta. Saldré pronto de la sombra. Allí es donde más cómodo me siento porque no quiero que la vida me cambie, no soy diferente después de haber vencido en el Tour.

O sea, que poco le importan los líos que puedan tener Contador y Armstrong.

Ni lo valoro. Llevo meses escuchando la misma pregunta y estoy un poco cansado ya. Sólo me interesa Carlos Sastre. Sé que he hecho los deberes y que estoy listo para este Tour y reabrir un sueño que ya se cumplió en 2008.

¿Cómo van a afrontar el trabajo colectivo para usted y para Thor Hushovd en los sprints?

Está todo planificado. Hay medio equipo para Thor y el otro medio para mí, pero si hace falta todos trabajarán para una misma dirección.

¿Conoce el trazado de la contrarreloj?

Tiene tramos muy duros de subida, los primeros siete kilómetros. Es explosiva y está claro que me viene mejor que una llana. Iré a darlo todo, a full de gas. Será importante pero no decisiva porque lo que quedará por delante son tres semanas de mucha batalla en las que habrá que mantener la cabeza fría.