La etapa más bonita de la Vuelta

Ayer tuvimos el gusto de vivir en Toledo la etapa más bonita de la presente Vuelta a España. Por la cantidad de gente que se agolpó en las cunetas del recorrido, por todo el público que se presentó en la meta, por la calidad del trazado y del ganador, todo un campeón del mundo. Los últimos 10 kilómetros fueron un auténtico espectáculo, con continuos sube y baja y repechos donde ningún equipo era capaz de controlar la carrera. Al final, pese a que el Caisse d'Epargne intentó llevar a Alejandro Valverde lo más cómodo posible, venció Paolo Bettini. El Grillo siempre moja en la Vuelta, es un hombre que sólo tiene en mente una cosa: el triunfo. Así conquistó Toledo y se impuso a otros dos superclases como son Philippe Gilbert y Valverde.

Con las bonificaciones, Sylvain Chavanel cogió el maillot oro de líder. Me alegro por el francés, es un corredor muy valiente y luchador, que lo intenta en cualquier prueba en la que participa. Gracias a los segundos de meta, Valverde también se distanció un poco más de Alberto Contador y de Carlos Sastre. El balance de esta primera semana nos deja al murciano como triunfador entre los favoritos a la general. Su equipo ya ha logrado una victoria parcial y ha portado el oro. Ya han cumplido los objetivos con los que llegaron a la Vuelta, pero seguro que quieren más, especialmente Valverde. La contrarreloj de Ciudad Real le ha reforzado moralmente y afrontará con ventaja las etapas pirenaicas. A partir de mañana comienza lo bueno con la montaña.