Un círculo diabólico a punto de cerrarse
El Bilbao Basket tiene en Lugo la última oportunidad para no completar un año sin ganar fuera. Ponsarnau: “Esa expectativa un poquito psicótica el equipo no la tiene”.
El Bilbao Basket, el equipo de la destrucción masiva en la Europe Cup, está a poco más de una semana de cerrar el círculo negativo, casi diabólico, de un año sin ganar a domicilio en la ACB. Para encontrar la última vez que levantó los brazos fuera hay que remontarse al 28 de diciembre de 2024, un 79-100 en el Coliseum ante A Coruña ante un rival recién ascendido que llevaba camino de regresar a la Primera FEB.
La única salida que resta en lo que queda de este hogareño 2025 es el domingo a Lugo, ante el Breogán. Luego quedará la cita ante el Barcelona en Miribilla para despedir el año. Es decir, hay una última oportunidad, ante un rival directo en la parte media de la tabla, de esos equipos que quieren mirar con ambición a la Copa y el playoff.
A Ponsarnau no se hace mucha gracia que le recuerden estos casi 12 meses de sequía en la lejanía, 15 partidos en total. Asegura que su equipo no tiene “psicosis” y recalca que tienen el foco puesto “no en ganar en casa o fuera sino en hacer todo lo posible para ganar”. “Entiendo que esa es la noticia, pero a mí lo que me centra no es la noticia sino querer ganar el siguiente partido”, subraya. “Esa expectativa un poquito psicótica el equipo no la tiene. Este es un equipo nuevo”, recalcó el técnico quien recordó además que sus jugadores, y también los de la pasada campaña, han logrado en estos doce meses varios triunfos como visitantes “en partidos exigentes” de competición europea.
El estratega de Tàrrega añadió sobre este asunto que “todo el mundo juega mejor y pone un poquito más de fuerza” en su pista y señala que a pesar de “haber competido siempre bastante bien” les ha “faltado un poquito a nivel físico para ganar según qué partidos”. Ponsarnau es consciente de que será complicado romper esa racha en el Pazo Universitario donde la pasada campaña, recordó, estaban “llevando muy bien el partido” hasta que se entró en “un pressing catch” que unido a la “atmósfera fantástica para ellos” que se creó en el pabellón les “fue fatal” y acabó en derrota.
“El Breogán ha conseguido un nivel de solidez ofensiva muy bueno. Tienen claro a qué jugar y cómo jugar y es muy limpio en su juego. Van buscando en cada partido jugadores que puedan ser protagonistas y siempre los encuentran. Son doce jugadores y tienes que estar pendiente de los doce”, explicó Ponsarnau.
De entre todos ellos destacó a Francis Alonso, a quien tuvo a sus órdenes en Bilbao en la temporada 2022-23. “Creo que ha encontrado un margen de juego, concepto y libertad en lo que le dan sus entrenadores y está jugando muy bien”, apuntó. Será un día especial para Hilliard, que encontró su mejor juego en el Breo, le entendió muy bien Luis Casimiro, y el Bilbao Basket hizo una jugada maestra arrebatándoselo al club celeste, aunque no está brillando a mismo nivel, ni mucho menos.
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Sylla cayó lesionado en el tobillo ante el Prievidza y estará de baja unas semanas. Frey, también con molestias en esa misma zona, no se entrenará este viernes, aunque es posible que sí llegue. Lo mismo que Normantas, que se cayó a última hora el miércoles, pero está mejor de los problemas en la espalda. Bagayoko va lidiando con los problemas en la muñeca.
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