MUNDIAL | EDICIÓN 2023 | GRUPOS | 1ª JORNADA
Raulzinho Neto se rompe y entristece la victoria de Brasil
La lesión del nuevo base del Fenerbahce, que fue retirado en camilla del Indonesia Arena de Yakarta, amarga y desluce el fácil estreno de la ‘verdeamarela’ ante Irán (59-100) en un partido sin historia. Asistencia 100 de Marcelinho en un Mundial.
Todo le iba de dulce a Brasil en su estreno en el Mundial ante la flojísima Irán hasta que, recién empezado el tercer cuarto, Raúl Neto Togni, Raulzinho, corrió una transición y, cuando se fue a levantar, apoyó mal, aparentemente, su rodilla derecha. El nuevo base del Fenerbahçe se marchó retirado en camilla mientras Marcelinho Huertas, que a sus 40 años habrá visto muchas de esas, se hacía cruces en el parqué del Indonesia Arena. Los médicos han confirmado que tiene roto el tendón rotuliano de la rodilla derecha tras someterle a una resonancia magnética. El accidente amargó el debut de la verdeamarela, que estaba cogiendo sensaciones con vistas al partido contra España y que demostró una insultante superioridad desde el inicio (0-10 con diez puntos de Caboclo). Al final, terminó ganando (59-100) con Marcelinho Huertas firmando el punto 100 del partido para la doble campeona del mundo en 1959 y 1963. El eterno base, además, dio su asistencia cien también en el Mundial,
El partido se hace difícil de explicar porque no tuvo historia. Irán es una selección muy menor que, además, vive los últimos días deportivos de Hamed Haddadi, a quien se ve muy disminuido físicamente y que, a sus 38 años, seguramente esté ante su despedida en un gran torneo salvo que tenga en la cabeza llegar a los Juegos de París. Aunque con lo que enseñó en el Indonesia Arena, a los persas no les dará para llegar.
El partido fue un suplicio para Irán, que miraba hacia arriba al marcador y se veía más de 30 puntos abajo todo el rato. Para Brasil, lo que empezó siendo una fiesta y un entrenamiento con público para coger confianza con vistas al partido contra España acabó con los pensamientos de los jugadores en la pierna derecha de Raulzinho. Las lágrimas con la que Lucas Dias se acercó al banquillo brasileño hacían temer lo peor. Al final, ninguno de los dos equipos quería estar ya en la cancha.