Triple corona Intercontinental del Lenovo Tenerife
La entidad chicharrera vence en la final al Sao Paulo brasileño. El partido se rompió en el tercer cuarto. Fitipaldo, Salin y Doornekamp, los mejores.
Cumpliendo los pronósticos, el Lenovo Tenerife despachó con suma autoridad al Sao Paulo brasileño (68-89) en esta Copa Intercontinental venida a menos tras las dos pachangas que se vivieron el viernes. Sea como fuere, el equipo de Txus Vidorreta continúa con su imparable progresión de los últimos años, puro pico y pala, y suma un nuevo título a sus vitrinas. Una copa al cielo siempre será una copa al cielo.
Aunque el Sao Paulo le había salido contestón, no tenía problemas el Lenovo Tenerife para tener el partido a su vera en todo momento. Empeñado en dar espectáculo, el equipo de Vidorreta empezó a marcar distancias desde la línea de tres, 7/17 al descanso. Desde más allá del 6,75 se ponían las botas Fitipaldo, Salin y Doornekamp, marcando distancias importantes desde muy pronto: 16-23. El equipo brasileño estaba dispuesto a presentar batalla, y a base de garra y orgullo se mantenía vivo al término de los primeros 10 minutos de juego: 19-25.
Pese a que tenía la situación controlada, tampoco es que el Canarias pudiera romper un duelo que sí parecía tener de cara. Por entonces ya estaba en cancha un revolucionario como Jaime Fernández, que se cascó cinco puntos seguidos para empezar a tambalear el marcador: 23-31. Inédito hasta entonces, entró en escena Marcelinho Huertas, todavía indescifrable su sociedad con Shermadini, dándole el brasileño el primer +10 a su equipo después de dos tiros libres: 25-35.
Si Doornekamp se cascaba su tercer triple, Marquinhos le daba a su equipo toda la vitamina que necesitaba para, una vez llegó el tiempo de descanso, mantener alguna esperanza de llevarse el título por mucha diferencia que hubiera entre ambos equipos: 35-43.
Parecía que el Sao Paulo se iba a enganchar de nuevo al duelo tras ese 2+1 de Da Silva que le ponía 38-43, pero entonces se le fundieron por completo los plomos al equipo carioca. Así, recibió un parcial de 0-17 en contra que elevó la diferencia hasta el 38-60 con canastas de todos los colores del equipo aurinegro, presa además el grupo brasileño de una antideportiva a Marquinhos. Se agarraron entonces los visitantes al clavo ardiendo que enarboló Coelho, todo corazón su alocado juego. Aunque pareciera increíble por lo vivido poco antes, todavía quedaba partido después de los primeros 30 minutos: 53-65.
Tras la intensidad que provocó un ligero intercambio de canastas al inicio del último periodo, el Lenovo Tenerife vio un hueco y pegó el acelerón definitivo con sendos triples de Doornekamp y Fitipaldo que pusieron de nuevo las cosas en su sitio: 57-75. La final ya estaba en el bolsillo y, con ella, la tercera Intercontinental del club lagunero en los últimos seis años, clara muestro de un progreso que sigue imparable. Suma y sigue.