Mario López niega las agresiones sexuales y alude a “contactos consentidos”
Comienza el juicio contra el exentrenador del Gernika por un presunto delinto con una menor

La Audiencia de Bizkaia ha iniciado hoy el juicio contra Mario López, exentrenador del Lointek Gernika, por un delito de agresión sexual continuada a una jugadora menor de edad de uno de sus equipos. Según la Fiscalía, los abusos ocurrieron entre 1998 y 2001, cuando López tenía 31 años y la víctima solo 13. La acusación particular, que ha solicitado que el juicio se celebre a puerta cerrada, pide 18 años de prisión, mientras que la Fiscalía solicita 14 años. Se desarrollará hasta el jueves, en tres sesiones.
El caso ha tenido un fuerte impacto social, especialmente en la villa foral, donde Gernikako Sare Feminista ha convocado una concentración frente a los juzgados de Bilbao para coincidir con el inicio del proceso. A través de las redes sociales se ha destacado la importancia de apoyar a la víctima y denunciar los abusos de poder en el ámbito deportivo.
La decisión de celebrar las sesiones sin público responde a la necesidad de proteger la intimidad de la víctima y evitar su confrontación visual con el acusado, según ha informado la Audiencia de Bizkaia. Este juicio ha despertado una notable atención mediática y social, especialmente en el ámbito del baloncesto femenino, donde el acusado tuvo una destacada trayectoria profesional.
Hoy ha declarado el exentrenador, la denunciante y la sicóloga que atendió a la víctima. Esta queda separaba por un biombo con el acusado para evitar la “confrontación visual”. Fuentes de la defensa de López han desvelado que éste negado las agresiones y se ha remitido a “contactos consentidos”, como besos y paseos de la mano, actividades no catalogadas como delito en la época en que supuestamente se produjeron. Según han trasladado las mismas fuentes, el acusado ha afirmado, “como lo lleva reconociendo desde hace años”, que fue una relación “de tipo platónico, sin ningún tipo de contenido sexual”. La defensa de López ha agregado que la denunciante “ha reconocido” que envió “cartas de amor” al exentrenador. Desde la acusación particular no se ha confirmado tal extremo y han declinado hacer declaraciones hasta que se dicte la sentencia.
Por contra, el escrito de la Fiscalía detalla que la víctima fue llevada en varias ocasiones al domicilio del acusado “bajo excusas”. Allí, presuntamente, cometió agresiones sexuales durante tres años.
El entrenador era descrito como “agresivo y desproporcionadamente exigente” en los entrenamientos, lo que generaba en la menor un clima de temor y sumisión. A raíz de los hechos, la víctima fue diagnosticada con trastorno por estrés postraumático y ha requerido tratamiento psicológico para superar las secuelas de los abusos.

La denuncia fue presentada en diciembre de 2023, más de dos décadas después de los presuntos hechos. Tras conocerse la acusación, el Lointek Gernika apartó inicialmente a López de sus funciones de entrenador, reasignándole a tareas administrativas. Finalmente, el club decidió despedirle, abonándole la indemnización correspondiente.
Mario López no solo dirigió equipos a nivel de clubes, sino que también tuvo un papel relevante en las selecciones nacionales de categorías inferiores. Como seleccionador de España en las categorías sub-16, sub-18 y sub-19, lideró equipos que obtuvieron cinco campeonatos europeos y dos subcampeonatos mundiales. Sin embargo, su reputación deportiva se ha visto gravemente afectada por las acusaciones que enfrenta.
La sesión, que contado con dos recesos, se ha prolongado durante casi cinco horas. Mañana declarará el psiquiatra que ha atendido estos meses a López y diversos testigos de ambas partes. El jueves tendrán lugar las conclusiones y el juicio quedará visto para sentencia.