Domínguez: “Espero disfrutar el verano con un oro”

Silvia Domínguez (36 años y 1,68 metros) estrenó capitanía en su Eurobasket número ocho. La base suma 210 internacionales con España (7ª en la historia) y está a un paso de su sexta medalla continental, la novena en total. Y si es un oro, Laura Gil y ella alcanzarán la cuarta, un récord en la historia de la Selección.

No jugo ante Alemania. ¿Todo bien?

Sí, sí. Físicamente bien. Simple decisión técnica, sin ningún problema. Ya lo dije antes del partido, son los duelos que, evidentemente te gusta estar en pista, pero que de una forma u otra todo el mundo es participe de las derrotas y de las victorias. Juegues uno, cero o 30 todo el mundo forma parte de ello.

En este Eurobasket, han ido de menos a más, con una gran actuación ante Alemania. Es la mejor forma de llegar a unas semifinales.

Sí, hemos crecido como equipo. Las adversidades que hemos tenido que superar nos han hecho más fuertes y el último partido es un buen reflejo de ello. Todo eso que hablábamos de años anteriores, de que cuando llegan los momentos importantes, respondemos. El primer gran momento del campeonato fue el partido ante Grecia; el segundo, el de cuartos y, ahora estamos en la lucha por las medallas que son los encuentros que ha todas nos gusta jugar y nos crecemos como equipo.

Ahora, toca Hungría. Se han visto con ellas en cuatro ocasiones desde 2021. ¿Es bueno, malo o da un poco igual al ser esto unas semifinales?

Creo que es bueno habernos enfrentado tanto los últimos años porque al final tienes más conocimiento a nivel individual de las jugadoras. Es verdad que esos dos partidos, los amistosos de preparación, no quisimos mostrar todo o planes de encuentro que podríamos hacer si hipotéticamente nos cruzábamos, y que seguro que el staff ha estado analizando tanto su evolución en el campeonato como los dos duelos que jugamos en la preparación: cómo nos jugaron, cómo atacamos y defendimos para tratar de buscar esas fracturas del equipo rival para incidir en eso.

¿Cómo ve a Hungría?

En un partido de esta tensión, nosotras tenemos más experiencia, pero ellas menos presión así que la balanza está más o menos equilibrada. Sabemos que tienen jugadoras pues muy importantes y en la rotación bajan un poco. Nuestra fortaleza es que, si ve nuestro campeonato, es cada día brilla una. Somos más difíciles de predecir.

Es posiblemente su último Eurobasket… Habrá que sacar un oro.

¡Ojalá! Lo firmó ya. Si es mi último Eurobasket, que es lo más seguro, sería muy redondo acabar con un oro.

No más Eurobasket, pero si hay París 2024, estará, ¿no?

Quiero estar, evidentemente. Pero ya sabe cómo son estas cosas: tienes que estar a buen nivel, te tiene que elegir el seleccionador y clasificarte. Hay muchos factores aún. De momento, estamos aquí, en estas semifinales.

Si sacan el oro, usted y Laura Gil serían las únicas de siempre con cuatro. Es mucha carrera recorrido, no sé qué significaría para usted.

Mucho. Al final, llevo aquí desde, de manera interrumpida, 2006. Son muchísimos años y he vivido los años del casi, de que fuera un éxito llegar a unas semifinales, de luchar por medallas hasta cada verano… dos oros consecutivos, medallas, no sé cuántos años seguidos. Y también esos dos años, 2011 y 2021, del bajonazo, y empezar de cero. Hay mucho recorrido en todo ese tiempo. Muchas jugadoras, compañeras, diferentes entrenadores. Y es bonito ver la evolución y que al final ves que España tiene la capacidad de cuando hay un bajonazo volver a impulsarse arriba. Eso es lo bonito de esta Selección, de este grupo, de las jugadoras que lo formas. Ojalá ese cuarto oro, que sería estupendo.

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Llegar hasta las semifinales con todas las bajas que han tenido, ¿da más mérito a lo conseguido?

Creo que sí. Al final, tiras para atrás y ves que hay Eurobaskets que hemos jugado sin Alba Torrens, que hemos estado en unos Juegos Olímpicos sin Sancho Lyttle… Siempre hemos tenido bajas y hemos sabido dar un paso adelante, sobreponernos y pensar ‘somos las que estamos y con esto tiramos hacia adelante’. Este es un año más. Si que es verdad que este verano hemos tenido muy mala suerte con el juego interior, pero estamos viendo una versión de Laura Gil increíble, una Raquel Carrera que parece una veterana, la aportación de Paula Ginzo, jugadoras que están jugando fuera de su posición para ayudarnos en el interior… Todo eso une mucho más como equipo.

Esas bajas en los diferentes torneos siempre han sido cubiertas por una cantera en constante renovación. Siempre hay gente nueva para un recambio generacional que es continuo, ¿no?

Sí. Es un buen trabajo de la Federación, de ir poco a poco introduciendo a esas jugadoras. Mezclar esa veteranía y esa experiencia con la frescura de las jóvenes y quizá no hacerlo de golpe. Vemos a otras selecciones, que cuando hay esas transiciones de manera tan fuerte están varios años sin aparecer en esas posiciones de arriba. En España hay mucho talento, mucho trabajo y se está haciendo todo muy bien desde diferentes posiciones de la Federación.

Cuando se pregunta a cualquiera de ustedes, siempre surge la expresión grupo, unió. ¿Es la Selección más colectiva que recuerda?

Siempre ha sido un poco así. Este año estamos teniendo a Laura Gil destacando mucho en números y quizás es algo que no habíamos visto de ella, pero que sí que sabíamos que lo tenía. Pero si es verdad que estamos teniendo la capacidad de que un día sale Conde, que el día antes casi no había jugado y pum, hace un partidazo. También de Queralt Casas, de Raquel Carrera… de muchas jugadoras. Todas sabemos el valor de la jugadora que tenemos al lado. Tenemos un grupo muy empático y sabemos darle el valor a cada persona que está aquí.

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No quiero meterla en un lío, pero alguna que le haya sorprendido más en este Eurobasket…

Uffff. Al final las conozco a todas, a la que menos quizás a Lola (Pendande). No sé, creo que cada una dentro de sus rol o de su situación me ha sorprendido. Cuando han salido a pista y han intentado hacer lo que se le pide y también por encima de las expectativas. No le podría decir una. Laura (Gil) para mucha gente lo que está haciendo puede sorprender. A mí, no. Lo que la hace diferente es de dónde viene: de hace un año estar sin andar y lo que está haciendo ahora es increíble.

Casas dijo ‘que somos muy buenas’; Quevedo, que ‘somos la rehostia’. ¿Cómo definiría usted a esta Selección?

Un grupo increíble. Siempre se ve lo que hay dentro de la pista, pero creo que hemos tenido una preparación en la que hubo cero conflictos, cero problemas. Realmente todas hemos disfrutado de este camino. Y cuando pasas esas cosas luego recuerdas más a las personas que lo que hay dentro de la pista. Disfrutas mucho más cuando todo lo de dentro es así.

¿Cuánta importancia tiene Miguel (Méndez) en todo esto?

Hay un buen balance entre cómo es él y el nivel de adaptación que tienen estas jugadoras y este grupo porque no todo el mundo puede hacerlo, venir a la Selección y tener un rol diferente al de sus equipos. Eso no es fácil de gestionar a nivel individual, colectivo. Ese balance ha sido muy bueno y eso es lo que da posibilidad de que pasen grandes cosas.

A nivel táctico deja mucha libertad para ver cómo somos capaces de reaccionar, que durante la preparación ha querido vernos en diferentes facetas tácticas y en ver en dónde nos sentíamos más cómodas para así crear una identidad. Se ha adaptado muy bien, es su primer torneo de grandes características y estamos en unas semifinales con lo cual muy bien.

Llevan una concentración muy larga. Imagino que se hace duro y, en su caso, un poco más al ser madre.

Se hace un poco largo. Las concentraciones se han hecho un poco lejos de Salamanca e imposibilitaba un poco el poder ver a mi hijo. Pero estoy aquí en el Eurobasket, luchando por medallas y todo eso que sacrifico por un lado, espero que tenga esa recompensa en forma de medalla. En un par de días estoy en casa, así que a disfrutar de las vacaciones, del descanso y del verano, que espero que sea con un oro.