No habrá ‘caso Yabusele’ con Mathias Lessort

El Panathinaikos, el actual campeón de Europa, es el equipo que menos va a cambiar la próxima temporada en la Euroliga. ¿Para qué tocar lo que funciona? Eso es lo que deben haber pensado desde los despechaos del club griego que, por ahora, solo ha hecho un fichaje, el de Lorenzo Brown. El hispano-estadounidense formará pareja en el puesto de base junto a Kostas Sloukas, el MVP de la Final Four. “Pensamos que necesitábamos un jugador como Lorenzo para darle descanso y, Dios no lo quiera, en caso de lesión”, explica Becerovic.

Solo un fichaje, pero que serán dos a corto plazo. El Panathinaikos busca pívot y Omer Yurtseven es el elegido, aunque todavía no hay nada cerrado. “No tenemos nada que ocultar, porque es uno de los jugadores que nos interesan. Se ha hecho algún contacto y hemos preguntado para saber si su llegada era realista o no, pero todavía faltan flecos para que se alcance a un acuerdo”. Su llegada podría suponer la salida de Olej Balcerowski, pretendido por el Unicaja este verano, pero sin sitio tras la llegada de Kim Tillie.

Uno de los jugadores más destacados en el título europeo fue Mathias Lessort, que también ha vivido un gran verano con Francia. El pívot de Martinica se colgó la plata olímpica en París (7,2 puntos y 3,3 rebotes) y en las últimas semanas se ha hablado del interés de algunas franquicias, entre ellas los Knicks, por él. ¿Un nuevo caso Yabusele? Becerovic zanja de raíz el asunto. “Tiene contrato con nosotros y sin cláusula NBA. Por eso estamos tranquilos. Sí que hubo algún interés previo, pero no fueron negociaciones serias”.

Vincent Collet, seleccionador de Francia, dijo durante los Juegos que no entendía que la NBA no se hubiera fijado todavía en él. “Probablemente haya sido el mejor pívot de la Euroliga y peleó con Sloukas por ser el MVP de la final. No entiendo por qué no juega en la NBA. No sé por qué ninguna franquicia lo ha fichado”.

Lessort, al que posiblemente nunca se le han abierto las puertas de la NBA por su altura (2,06), fue draftedo por los Sixers en 2017 y, sin ofertas en la Liga norteamericana, se quedó en Europa donde ha pasado por Francia (Nanterre y Mónaco), Serbia (Estrella Roja y Partizán), Alemania (Bayern Múnich), Israel (Tel Aviv) y España (Unicaja). El Partizán de Zeljko Obradovic fue su último equipos antes del PAO y allí ya demostró de lo que era capaz, acabando dentro del quinteto ideal de la Euroliga en su segundo año.

“Mathias ha demostrado que lo que hizo en Belgrado no fue una coincidencia. Si fue durante algún tiempo un jugador que tenía momentos de gran inspiración, ahora se ha convertido en uno de los pívots más dominantes. Y no sólo en Europa, también a nivel mundial. Naturalmente, queremos que se quede con nosotros el mayor tiempo posible y haremos todo lo que esté en nuestra mano para que lo haga”, sentencia Becirovic.

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