Musa: “El Dubái Basketball jugará una Final Four en los próximos tres años”
El escolta bosnio charla con AS en el inicio de su aventura en los Emiratos: “Mi primera opción era seguir en el Real Madrid, pero fue una cuestión de contratos”.
Dzanan Musa (Bihac, 1999) tiene todavía, con 26 años, seguramente sus mejores años de baloncesto por delante. Pero ya apila muchas experiencias en una carrera en la que empezó siendo la gran esperanza europea de la generación de 1999 junto a Luka Doncic. Él, sin embargo, tardó más en encontrar su sitio: tuvo un paso desafortunado por la NBA, en Brooklyn Nets, y ganó la Euroliga de 2021 con un Efes en el que Ergin Ataman apenas confiaba en él. Después, el turco pidió públicamente perdón a un jugador que resurgió en Lugo con el Breogán, una historia de amor con la ciudad y el MVP de la ACB en 2022, y se asentó en la elite en tres años en un Real Madrid con el que ganó todo, incluida su segunda Euroliga, pero donde también se acabó cuestionando su posición. Tanto que este verano, y después de una temporada de mensajes cruzados, decidió cambiar de aires y aceptó la oferta del Dubai Basketball. Una nueva vida en los Emiratos y un nuevo mundo en la Euroliga. Desde allí, como líder de un proyecto que da sus primeros pasos en la elite, charló con AS un escolta bosnio que deja claro que no hay rencores ni cuentas pendientes en su relación con el Madrid.
Empecemos por el Eurobasket. Se quedó fuera del campeonato a ultimísima hora por una traicionera cirugía abdominal. Después, Bosnia logró su gran objetivo: el billete para los cruces.
Sí, fue un golpe muy fuerte para mí y para mi familia. Vi el campeonato muy triste, porque para mí siempre es muy importante estar con mi selección. Al final fueron días malos para mí… pero muy buenos para el equipo. Pasamos la primera fase y ahora lo que queremos, el gran objetivo, es dar otro paso adelante en el próximo Eurobasket.
Y Bosnia dejó fuera a España, que no superó la primera fase en el mismo grupo.
Sí, qué cosa más rara, ¿eh? Al final, es que así es el baloncesto. Y en estos torneos todo cambia si pierdes un partido concreto, ganas otro… por eso este es el mejor deporte del mundo. Tenemos claro cómo funciona, así que para nosotros fue espectacular meternos en los cruces de Letonia mientras que un equipo como España se tenía que ir a casa. Son las cosas que pasan en los Eurobasket…
¿Y por qué pasan? Entre 2022 y 2025, Nikola Jokic, Luka Doncic y Giannis Antetokounmpo han sacado, en total, un bronce. El de Giannis este verano.
Es lo que pasa cuando hay toda una fase de partidos que son todos eliminatorios, a todo o nada. Tienes que ganar tres o cuatro seguidos para asegurarte una medalla y eso no es fácil para ningún equipo. Es muy complicado ir salvando todos esos días. Lo que hizo Grecia, por ejemplo, y por mucho que tuviera a Giannis Antetokounmpo, no deja de tener muchísimo mérito. Y yo estoy feliz por él porque es un jugador que siempre lo da todo para ayudar a su selección.
Hablemos de su cambio de equipo este verano. ¿En qué momento tuvo claro que se había acabado su etapa en el Real Madrid?
La verdad es que no fue hasta final de temporada, cuando acabó la Liga. Fue una decisión mía, completamente mía. Mirándolo todo ahora con perspectiva, estuve muy feliz en el Real Madrid, ese club seguirá siendo como mi familia, pero aquí en Dubái me ofrecieron un contrato muy bueno, con un proyecto nuevo y muy bonito. Y creo que tomé la mejor decisión.
Pero su primera opción durante toda la pasada temporada era seguir en Madrid.
Sí, sí, claro. Pero en realidad todo fue una cuestión de contratos. Tampoco quiero entrar ya en detalles sobre eso. Me quedo con el amor hacia el Real Madrid, hacia los que eran mis compañeros… y hacia Florentino Pérez. Es un tío increíble con los jugadores, estábamos muy felices trabajando para él.
¿Hubo opciones concretas de tener una segunda oportunidad en la NBA?
Hubo una real, sí. Pero me gusta más la Euroliga y me apetecía más lo que me ofrecía este proyecto nuevo en Dubái.
Es un cambio muy grande. Pasa a jugar en el Golfo Pérsico, en una cultura distinta, en un club que hace ahora su debut en la elite europea…
Los primeros días fueron difíciles. Mucho calor y un equipo en el que todo era nuevo después de haber estado tres años asentados en el mismo sitio; en la misma casa, Valdebebas… Aquí todo es completamente diferente, pero creo que vamos a tener la oportunidad de ser uno de los mejores equipos de la Euroliga. Estoy segurísimo. En los próximos tres años creo que ya vamos a jugar una Final Four, así que he llegado con muchas ganas de poner en marcha todo esto. No fue para nada una decisión fácil quitarse la camiseta del Real Madrid, pero ya estoy muy feliz aquí.
¿El objetivo es estrenarse en Euroliga con plaza en los -normalmente carísimos- playoffs?
Sí, sin duda. Creo que podemos, que vamos a estar ahí. Podemos ganar a cualquier equipo de la Euroliga. A ver cómo estamos en esa parte de la temporada, pero vamos a llegar, sí.
Hay mucha igualdad pero da la sensación de que los favoritos vuelven a ser Panathinaikos, Olympiacos, Fenerbahçe, Real Madrid…
Es que en la Euroliga hay diez equipos que parten como favoritos. Y, a partir de ahí, ya sabes cómo es esto: depende todo de cómo llegas al playoff y como llegas después, si llegas, a la Final Four. Y en función de eso ganas o no ganas. No es nada fácil, ni meterse en playoffs ni pasar de ahí a la Final Four, claro. Pero vamos a ver hasta dónde podemos ir este año.
Se salta además a veinte equipos, lo que convierte en más duro todavía un calendario que ya era muy exigente. El Dubai Basketball compaginará por primera vez la Euroliga con la potente Liga Adriática.
Para el Dubai Basketball como club es un momento muy bonito porque vamos a jugar dos competiciones de máximo nivel como la ABA y la Euroliga. Pero para los jugadores va a ser muy duro, muy difícil. El baloncesto europeo necesita que la Euroliga y la FIBA se sienten y hablen un poco de la salud de los jugadores porque ahora se están viendo cada vez más lesiones graves, en las pretemporadas y durante los meses de competición. No es fácil con todos los viajes que hay ahora, el volumen de partidos… Nuestra parte es hacer nuestro trabajo: jugar.
Además, van a tener muchísimas horas de vuelo. El cálculo es que pasarán el equivalente a veintidós días en el aire para cubrir todos los desplazamientos desde Dubái.
No lo quiero ni pensar (risas). Es algo increíble, pero vamos a estar ahí. Cada día con experiencias nuevas; van a ser muchísimas horas metidos en aviones, pero esta es nuestra parte del trabajo.
En cuanto a su adaptación y la de su familia, más allá del equipo, ¿qué ha sido hasta ahora lo que más les ha gustado de Dubái?
A mi familia le está gustando mucho Dubái. Mi mujer está encantada aquí, mis padres han venido también… estamos muy felices aquí. Somos una familia grande, podemos estar todos juntos aquí y nos gusta mucho.
Pero echará de menos Madrid…
Sí, mucho. Mi casa ahora es Dubái, pero también lo sigue siendo Madrid. Lo que más echo de menos puede ser la comida… pero en realidad todo, la vida allí es muy buena. Pero aquí en Dubái tampoco está nada mal.
¿Sigue hablando con los que eran sus compañeros hasta junio?
Claro, mucho. Sobre todo, con Edy Tavares. Muchísimo, es mi amigo, mi hermano para toda la vida. Un tío muy grande que se merece todo lo bueno que le pase.
El que era su entrenador, Chus Mateo, ahora se va a poner al frente de la Selección española. ¿Le sorprendió la noticia?
Chus es un tío muy bueno, de verdad. Una de las mejores personas que he conocido en mi vida. Hemos ganado mucho juntos, seis títulos en tres años no es algo precisamente malo. No son pocos. Logramos mucho en el Madrid y también es como de mi familia para toda la vida. Me alegro mucho por él.
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