Micic: “El Madrid estuvo intensamente interesado en mí”

Vasilije Micic fue uno de los grandes protagonistas del mercado veraniego en la Euroliga. El base serbio (31 años y 1,96 m) decidió poner punto final a su aventura por la NBA tras dos temporadas y tres franquicias: Oklahoma City Thunder, Charlotte Hornets y Phoenix Suns.

Y después de sentir en sus propias carnes la vorágine del mercado de traspasos en la Liga norteamericana: en siete días, tres equipos. Regresó a Charlotte desde Phoenix y, a continuación, fue traspasado a Milwaukee. Los Bucks lo cortaron nada más realizarse la operación. Sin equipo, la Euroliga aguardaba.

“Regresar a Europa este verano ha sido la decisión más importante de mi vida en el baloncesto. Quería reencontrarme, tener paz interior. Las experiencias con los traspasos fueron desagradables y quiero seguridad. Yo quería ser paciente a la hora de decidirme y ya había descartado la opción de la NBA. Ese traspaso desde Charlotte me dio otros 15 días para relajarme y recibí el interés de algunos equipos que trataron de presionarme con los plazos”, comentó el serbio en una entrevista en el X and O’s Chat Podcast.

A Micic no le faltaron las ofertas cuando la decisión de volver a Europa estaba tomada: “Hubo cuatro equipos que compitieron intensamente: Real Madrid, Fenerbahçe, Olympiacos y Hapoel Tel Aviv. Incluso el Estrella Roja estuvo entre ellos en algún momento”, continuó el base, que dejó la Euroliga tras conquistarla en dos ocasiones, 2021 y 2022, con el Anadolu Efes.

Ergin Ataman fue su entrenador en esa experiencia turca. El técnico se encuentra ahora en el Panathinaikos y, por eso, los rumores sobre un posible aterrizaje en el club verde estaban sobre la mesa. “Realmente no tuve ninguna conversación con ellos. Tengo una relación excelente con él, pero teníamos visiones diferentes. Algunos equipos no pudieron cumplir con mis requisitos financieros”.

El Hapoel fue el elegido. Los israelíes umplían con sus requisitos económicos, y con creces, porque Micic firmó por tres temporadas y 14 millones de euros netos (4,6 millones limpios por año), que lo convierten en el jugador mejor pagado del Viejo Continente por delante de los 13,5 millones de Kendrick Nunn.

Un acuerdo al que llegó sin su representante de toda la vida, Misko Raznatovic. El balcánico cambió de agente en abril por, entre otros, motivos personales: “Tuve mi primera conversación con él a los 16 años. El hecho de que decidiera separarme de él es mi victoria sobre las emociones; tomé esa decisión basándome en valores humanos más que en desacuerdos comerciales. Durante siete años le había estado señalando las cosas que me molestaban. Él construyó un imperio y lo respeto, pero el problema surgió cuando le dije: ‘Sí, pero también soy Micic’. una y otra vez, volvimos al mismo tira y afloja sobre quién tenía razón”.

“El problema que pude superar en nuestro conflicto fue el dinero. Me di cuenta de que podía perdonarlo, aunque la cantidad no fuera pequeña, pero cuando escuché que había mencionado algunas cosas personales sobre mi madre, fue algo que no pude perdonar”, concluyó Micic, que se despidió el sábado del Eurobasket.

Serbia cayó de manera sorprendente en octavos de final ante Finlandia (86-92) con solo 8 puntos anotados por él. El base no ha tenido su mejor campeonato continental. Aquejado por problemas físicos ha jugado 13,4 minutos de media y ha promediado 4 tantos y 1,8 asistencias para 2,7 de valoración. Cifras muy bajas para ser uno de los llamados mejores jugadores de la Euroliga.

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