Jabari Parker, castigado en el Partizán

Un par de victorias contra Bayern y Estrella Roja, un duelo que no es obviamente un partido más, habían aplacado mínimamente el enorme malestar que rodea al Partizán, un equipo cuyo caótico inicio de temporada condujo a la renuncia, un drama para una de las aficiones más apasionadas de Europa, de Zeljko Obradovic, más que una leyenda en el club de Belgrado. Sin embargo, el desastre contra la Virtus (68-86) reabrió todas las heridas en un equipo que ahora marcha 6-10, cerca de la cola de la clasificación, y en el que tiene una papeletea complicadísima en el banquillo Mirko Ocokoljic, todavía al frente mientras siguen los rumores de que puede llegar otro entrenador. Con el español Joan Peñarroya, despedido por el Barcelona hace más de un mes, como una de las principales opciones.

El ambiente fue muy tenso durante todo el partido, primero con abucheos al nuevo director deportivo, Zarko Paspalj, y después, tras una derrota con muy malas sensaciones, con bronca para los jugadores. Al base Duane Washington Jr incluso le lanzaron un mechero que él recogió y se lo dio a los encargados de seguridad: “Tenemos unos aficionados que son muy apasionados, esto son cosas que se puede esperar si la fastidiamos. Y así están las cosas ahora. Esto es Serbia, los aficionados aquí son así y esto es lo que hay”.

Sterling Brown, otro de los estadounidenses del equipo, también ha hablado de una situación ya difícilmente sostenible: “Me dan igual los abucheos, lo que tenemos que hacer es tener más cuidado con las posesiones, no tener tantas pérdidas. Con eso, creo que podríamos haber ganado. Pero si acabas con 20 pérdidas es difícil haber podido hacer tu juego en ataque o haber defendido con ritmo”.

Jabari Parker, fuera de la rotación

Una de las sorpresas del partido fue que Jabari Parker se quedó sin pisar la pista. Ocokoljic confirmó después que había sido una decisión suya, como entrenador, y que se había basado en las sensaciones que había tenido después de ver los entrenamientos del equipo en los últimos días. El ex del Barcelona también quiso explicar su punto de vista después de este castigo: “Perdimos, y de eso se trata. No de mí, del equipo. No jugué por decisión del entrenador, y ya está. Soy un profesional, tengo que pensar en el próximo partido. No podemos dejar que en concreto determine cómo es nuestra temporada; tenemos que reaccionar y ganar. Mi prioridad es jugar, claro. Todos sabéis de lo que soy capaz. Soy uno de los mejores jugadores de Europa, y así quiero que sea. Veremos si es aquí, si es en otro sitio… tengo que pensar en mi futuro. Pero soy un profesional y ante todo tengo que estar al pie del cañón mañana, sea cual sea la situación.

Además, el ala-pívot dejó claro que Ocokoljic no le había dado ninguna explicación: “No, pero lo que me preocupa es que los periodistas me estéis preguntando estas cosas. ¿Por qué soy tan importante? Obviamente, no he tenido nada que ver con esta derrota, no he jugado. Así que no debería ponerse el foco sobre mí. Debería estar en el equipo y en unos compañeros a los que quiero apoyar”. Y, por último, habló de la posible de Joan Peñarroya, el que fue su entrenador la temporada pasada en el Barcelona y con el que, se dice, no acabó del todo contento: “No sé, no tengo ni idea. Él tiene su propia filosofía, no es que hayas estado en el mismo equipo hace dos días. Él tiene su idea y con eso vendría”.

Payne, el posible revulsivo NBA

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Además, el Partizán sigue buscando refuerzos en el mercado NBA. Después del rumor que podría intentar fichar a Malik Beasley, algo que negó el propio escolta, desde la prensa serbia aseguran que hay un acuerdo casi hecho con Cameron Payne. Y que podría concretarse una vez que se oficialice la llegada de Peñarroya al banquillo. Payne está sin equipo después de una década en la NBA. Pick 15 del draft de 2015, ha jugado en siete franquicias, la última los Knicks, la temporada pasada. En la Gran Manzana promedió 6,9 puntos y 2,8 asistencias. Su mejor momento llegó en las Finales de 2021, cuando ejerció de base suplente de Chris Paul en los Suns que jugaron las Finales de la NBA (perdieron, 2-4, contra los Bucks de Giannis Antetokounmpo). En su carrera ha promediado 7,8 puntos y 3,2 asistencias con un 36,8% en triples.

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