Higgins, a punto de irse del Barça
Tras la salida del montenegrino, el Barça ultima un acuerdo con su otro gran referente de las últimas temporadas. El puzle deportivo sigue sin completarse.
El Barcelona está en plena transformación de su proyecto deportivo, de la era Jasikevicius, un tramo que duró menos de lo que se esperaba en el club cuando se concretó el deseado fichaje del técnico lituano (finalmente, tres años en el banquillo azulgrana), al inicio de una nueva etapa con Roger Grimau al frente, un entrenador sin experiencia en la elite pero que desde luego conoce bien la casa. Y tiene, algo esencial en este momento para la entidad, una ficha mucho más manejable que la de su predecesor.
El Barça trata de reducir de forma notable su presupuesto sin perder capacidad competitiva, una ecuación complicada para Juan Carlos Navarro, al que todavía le queda trabajo por hacer. En el capítulo de bajas, se confirmó el adiós de Nikola Mirotic (finalmente sin acuerdo entre las partes, por las bravas) y parece cercano el de Cory Higgins, el otro gran referente en lo deportivo del proyecto de los últimos años, pensado para ganar la tercera Euroliga, un objetivo que finalmente voló pese a tres visitas consecutivas a la Final Four. Higgins tiene 34 años y los problemas de espalda le han impedido rendir a su mejor nivel en las dos últimas campañas, después de su millonaria renovación por tres temporadas en junio de 2021.
El escolta tiene un año más de contrato y uno de los salarios más altos de la plantilla, así que su destino siempre ha parecido similar al de Mirotic: salir de un proyecto en el que su ficha es un problema y que toma un nuevo rumbo deportivo. El general manager del Estrella Roja, Milan Dozet, ha confirmado en una entrevista con Sputnjik que Higgins está cerca de acordar su salida del Barça y que es un fichaje que se plantean… aunque la salud sigue siendo un asterisco fundamental: “Tiene que rescindir su contrato con el Barça, y están en las últimas negociaciones. Pero físicamente no está bien, las informaciones no son positivas. Por lo que dice su agente, estará fuera del mercado al menos un mes y luego verá qué opciones tiene”.
En la misma entrevista, Dozet habla de Nikola Kalinic, que también ha sonado con fuerza como posible víctima del recorte presupuestario del Barcelona pero que de momento sigue en el club azulgrana: “Estuvimos en contacto con él durante la temporada y cuando acabó, pero sigue teniendo contrato con el Barça. Si por alguna razón deja de ser así, estoy seguro de que su siguiente parada será regresar al Estrella Roja”. Sin Jasikevicius, con el que tuvo roces, la continuidad de Kalinic parece la opción más probable porque además el Barça tendría, si el serbio se va, un serio problema de aleros altos.
La plantilla es un puzle ahora mismo inacabado, en todo caso. Además de Mirotic y pendientes de Higgins y Kalinic, el club ya ha confirmado las bajas de Sanli, Kuric, Tobey y un Sergi Martínez que se va cedido al Girona. En el capítulo de altas, hay una apuesta fuerte y clara por los jugadores nacionales: Willy Hernangómez, Joel Parra y Darío Brizuela. Además, parece que el canterano Michael Caicedo (20 años) estará en el equipo después de un año de cesión en Granada. Pero faltan piezas, y más si se piensa en el nivel de exigencia Euroliga. Y ha habido dos golpes muy duros con los fallidos intentos de fichar a Kevin Punter y Juancho Hernangómez. El primero tuvo un acuerdo que no fructificó con los azulgrana y decidió renovar con el Partizán. El segundo parecía cerca por su deseo de jugar con su hermano Willy si dejaba la NBA, pero finalmente ha firmado con el Panathinaikos.
Eso deja necesidades obvias en la posición de escolta, para la que se busca un jugador con tiro exterior, y también en la de ala-pívot, menos profunda que la de cinco puro, en al que están Willy, Jan Vesely (se paró un órdago del Panathiniakos por el checo) y el prometedor James Nnaji (18 años), que va a retrasar al menos un año su (en principio inevitable) salto a la NBA.
En las últimas semanas también se ha especulado con una posible salida de Nicolas laprovittola, pero esta opción dejaría aún más tocada una rotación de escoltas en la que el argentino se supo integrar para dejar el puesto de principal base puro a Satoransky. Así que la situación del Barça es complicada, aunque queda mucho verano: pendiente de romper su contrato con Higgins y de posibles salidas que serían peliagudas en lo deportivo (Lapro, Kalinic…) necesita en todo caso, y si no se va nadie más, al menos dos fichajes más (un dos y un cuatro) de alto nivel Euroliga. O eso parece, si quiere rematar un equipo de máximas garantías para el año I del proyecto Grimau… y el año I post Nikola Mirotic.