Grimau: “Alguna Euroliga más deberíamos tener”
El nuevo técnico del Barça insiste en que el equipo “está en proceso de construcción”, pero confía en poder pelear por todos los títulos mientras da la plantilla por cerrada.
El 26 de junio el Barça anunció que que Sarunas Jasikevicius dejaba el banquillo del Barça y poco después comunicaba que Roger Grimau (Barcelona, 14/07/1978) era su sustituto. El capitán azulgrana de la última Euroliga se estrena en uno de los grandes de Europa sin experiencia en la élite, pero con ganas de demostrar que está preparado para coger las riendas del Barça.
¿Cómo ve al equipo tras la pretemporada? ¿Preparado para arrancar la ACB?
Lo veo bien, pero es verdad que solo hemos podido hacer un entrenamiento normal de pretemporada, aunque ya sea temporada, todos juntos. Estoy contento de cómo estamos trabajando. A nivel de resultados, no… Perder contra el Real Madrid en la Supercopa me entristece porque no pudimos ganar y jugar la final. Pero también hay que ponerlo en contexto. Estamos construyendo el equipo. Pese a los automatismos de la temporada pasada mi forma de jugar es nueva. También para los fichajes. Intentamos que el proceso sea lo más rápido posible.
Tienen un inicio duro: Joventut, Madrid, Efes… ¿Quizás no es el mejor para un equipo renovado?
No es el calendario más amable que nos podría haber tocado, pero es el que es y hay que ir a por todas.
¿Le sorprendió que apostaran por usted como entrenador del primer equipo?
Yo siempre intentaba estar preparado y trabajar por si algún día llegaba la propuesta. Pensaba que era muy difícil y complicado que llegase, pero intenté estar muy preparado por si llegaba tener claro que podía cogerla.
¿Era un objetivo a medio o largo plazo?
No me gusta pensar mucho en el futuro. Yo estaba encantadísimo trabajando en el básquet formativo, creo que estábamos haciendo un trabajo muy bueno. No me marcaba más allá del siguiente entrenamiento o del siguiente partido. Ni siquiera pensaba en la temporada entera. Pero a la vez dentro mío siempre había un runrún que me decía que sí, que quería ir hacia arriba. Pero no era un objetivo principal en mi vida.
¿Venir de la base es una ventaja?
Creo que es una escuela de aprendizaje gigante, donde he crecido mucho como entrenador. Estoy muy satisfecho y muy contento del camino que he recorrido.
¿Siente más ilusión que presión?
Siento muchísima ilusión, mucha felicidad por estar aquí pero también mucha presión evidentemente. Pero es la que me autoimpongo. Por mucha presión que venga de fuera no será mayor que la que me autoimpongo. Como lo hacía el año pasado.
¿Qué objetivos se plantea a nivel personal?
Me planteo el entrenamiento de mañana. Es tan bestia todo lo que comporta ser entrenador del Barça que no me da para pensar a un mes, seis meses o un año vista. Estoy pensando en qué haré en el siguiente entrenamiento, qué mejorar, qué hacer contra el siguiente rival… Hay tal volumen de cosas. Yo soy una persona que está por una cosa y ya. Conozco gente que es capaz de estar aquí y en seis cosas más. Pero yo no, tengo hasta dificultades para saber qué comeré hoy (risas).
Es tan bestia lo que comporta ser el entrenador del Barça que no me da para pensar más allá de mañana”
¿Catorce temporadas son demasiadas sin ganar la Euroliga para un club como el Barça?
Nos gustaría haber ganado más. Ya no hablo como entrenador, sino como culé. Nos hubiese gustado tener más. En nuestra historia han pasado diferentes equipos, circunstancias, cosas… Alguna más deberíamos tener.
¿Sigue siendo la Euroliga el gran objetivo de la entidad?
El objetivo del Barça desde que yo pisé este club como jugador, incluso como lo vivía como niño o aficionado, siempre es competir. Siempre es ganar. Eso es así, por supuesto. El tema es cómo vamos a competir. Desde la obligación, desde la ilusión, las ganas, la presión… Eso cada uno lo ha de gestionar a su manera.
¿Tiene la sensación de que la Euroliga cada vez es más potente? ¿Qué cada vez es más difícil ganarla?
Sí. Tengo la visión desde fuera pero veía que los últimos años es una liga durísima. Cada jornada hay cuatro o cinco partidos top. ¡Cada jornada! Además le has de añadir que la Liga Endesa no te permite descansar, como ocurre en otros países. Aquí siempre estás exigido, si no estás bien, pierdes.
¿Con el cambio en el banquillo hay un cambio de paradigma en el equipo?
No soy una sorpresa para la gente que me ha fichado porque me conocen y me han visto trabajar. Yo tengo mi manera, ya no de ser entrenador, sino de ser persona. Y así soy como entrenador. Creo mucho en esta manera de hacer, estoy convencidísimo. A partir de aquí hay que crear el mejor equipo posible para competir al máximo.
Sus jugadores coinciden en que con usted al mando tienen más libertad en la pista…
Es que yo soy así. Me gusta ser muy ordenado y tener unas estructuras muy claras. Que las cosas sigan mi filosofía. Pero dentro de estas estructuras poder dar un punto, no me gusta decir libertad… sino de que los jugadores expresen su talento. Todos en la plantilla son muy buenos. Mi idea es ordenarlos para que puedan sacar ese talento. Es una manera de hacer más a fuego lento, que tarda un poco más, pero de la que estoy convencido y de la que quiero jugar.
“Me gusta que los jugadores puedan expresar su talento en la pista”
Al Barça de fútbol además de ganar se le exige jugar bien. ¿Al baloncesto también?
Hay ciertas diferencias. El fútbol es diferente. Entiendo el paralelismo y sí, a la gente en el Palau le gusta el buen básquet, divertirse y sobre todo le gusta ganar. Una cosa va ligada a la otra. Si juegas buen baloncesto ganarás más.
En este inicio han encajado bastantes puntos en contra. ¿Es algo que le preocupa?
Me preocupa. También lo meto dentro del contexto que hay. Nos conocemos poco y los mecanismos defensivos los estamos cogiendo. También es cierto que queremos jugar más rápido y a más posesiones… pero es un punto que hay que mejorar. Confío que llevando tiempo juntos mejore. Estaba acostumbrado a las pretemporadas como jugador, que eran largas, estas son muy cortas.
A Willy, Parra y Brizuela los conocemos. ¿Qué podemos esperar de Jabari Parker? ¿Cómo lo ve?
Lo veo bien, adaptándose. Ha tenido que cambiar de país, de continente, cultura, conocer nuevos compañeros, una manera de jugar diferente a la NBA… Va dando pasitos para adaptarse. El proceso es un poco más lento porque llevaba tiempo sin competir. Es una persona con mucho interés, que te escucha mucho y que intenta mejorar cada día. Tenemos mucha confianza en que mejore rápidamente.
¿La plantilla está cerrada?
Ahora mismo está cerrada pero como Barça que somos hay que estar pendiente de si hay alguna oportunidad que mejore el equipo. Estoy contento con la plantilla y a día de hoy está cerrada.
A día de hoy la plantilla está cerrada, pero somos el Barça...”
Se encontrarán al Real Madrid muchas veces esta temporada… ¿Cómo les ve?
Los veo bien, llevan tiempo juntos. El único fichaje es Campazzo que se puede decir que es uno más, que es como si nunca se hubiese ido. Son un grandísimo equipo. El gran rival, pero nosotros también somos un muy buen equipo que será muy difícil de ganar. Competiremos al máximo.