España patina en la Euroliga
Los tres equipos ACB han caído en más partidos de los que han ganado (16-17) en un pésimo inicio de temporada en la competición continental.
Los triples del Bayern seguían cayendo, uno tras otro: 20 con un increíble 47,6% (propulsado, claro, por el 11/16 de Andreas Obst). El Barça se quedó en un triste 4/18 (22,2%), así que la cuenta era fácil: el Bayern anotó 48 puntos más desde la línea de tres y trituró en porcentajes a un Barcelona que no pudo ni competir en la segunda parte. Algo parecido a lo que le pasó, hace menos de un mes en El Pireo. En el Palau tampoco supo parar la crecida final del Paris Basketball. A pesar de un inicio muy correcto de Euroliga, el equipo de Peñarroya ha empezado a patinar y está 7-4, octavo en la tabla (empatado con el quinto, eso sí) y con sensación de que, otra vez, va corto para las grandes citas europeas. Ya sean pesos pesados (Olympiacos) o nuevas sensaciones (París, Bayern).
Y, con todo, el Barça es el mejor de los españoles en esta Euroliga que ha consumido once jornadas: el Real Madrid sigue en negativo (5-6) a días de un Clásico en el Palau que dejará muy, muy tocado al que pierda. El equipo de Chus Mateo es décimo. Y el Baskonia, decimotercero con un pobrísimo 4-7, una inercia de apariencia destructiva y ya cinco derrotas seguidas después de un buen inicio. En total, 16-17 y balance negativo para los tres equipos españoles, ninguno entre los siete primeros de la clasificación. Algo muy distinto a lo que que suele ser habitual para la representación ACB en la Euroliga. Sobre todo si se mira a Madrid y Barça, claro.
Si se atiende a las últimas temporadas, no hay nada ni remotamente parecido: en once partidos, el curso pasado los tres solo apilaban ocho derrotas (de 33 posibles: 25-8); En los cuatro años anteriores a ese: 22-11, 22-11, 21-12 y 23-10. Ahora son ya 17 partidos perdidos en una mezcla tremenda de malas rachas. Para el Barcelona, es el peor inicio europeo desde 2018, cuando firmó un 6-5 en estos mismos once partidos. Desde entonces, no había bajado del 8-3 hasta ahora, y la temporada pasada (que tan mal acabó) estaba 9-2 a estas alturas.
El Real Madrid tampoco había vivido nada como esto desde 2017, cuando comenzó también 5-6. Ese año, eso sí, acabó siendo campeón de Europa con Luka Doncic como MVP antes del salto a la NBA. El equipo blanco cerró quinto la fase regular pero fue capaz de imponerse en cuartos, sin factor cancha, al Panathinaikos. Después, lo peor había sido un 6-5, por no hablar del 10-1 de la temporada pasada, abierta con diez triunfos consecutivos y una derrota, justo en el partido once, de forma casi milagrosa en Estambul, en la prórroga contra el Fenerbahçe (100-99).
El Baskonia, por ahora, tampoco encuentra soluciones con Pablo Laso, cuya llegada trajo un obvio foco de ilusión en verano. El 4-7 iguala el inicio de la temporada 2021-22 y empeora el de las dos últimas (6-5 en ambos casos), temporadas que han sido muy pobres para los vitorianos, en una fuera de cuartos y en otra, la pasada, clasificados en el play in pero barridos por el Real Madrid en el playoff.
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