El Real Madrid recupera a Hanga, pero pierde a Causeur

Chus Mateo atendió a los medios en la previa de la quinta jornada de la Euroliga, este jueves ante la Virtus Bolonia de Sergio Scariolo (20:45, Dazn). El técnico madridista fue ayudante del seleccionador en el Madrid y el Unicaja durante seis temporadas y luego en la Selección. Ahora se cruzan los dos con sus equipos necesitados de victorias. Lo blancos, con un balance de 2-2 y los de la V negra, con tres derrotas en cuatro jornadas. Para este encuentro, Mateo recupera a Adam Hanga, que recayó en la Supercopa de una lesión muscular previa y vuelve después de un mes; pero pierde a Fabien Causeur, con molestias en un tendón de una rodilla y una fascitis en el pie de la otra pierna. Sobre la situación actual del equipo, el técnico madrileño lo ve de esta forma: “Esto es una carrera de fondo y debemos estar preparados para el próximo título que se presente, para jugar la final. Debemos tenerlo claro y también la paciencia suficiente para entenderlo desde el primer momento, por lo menos los de aquí dentro”.

Hace 20 años que no hay un Madrid-Virtus. “La Virtus es un tapado para entrar en el playoff de la Euroliga, un equipo con talento, con un entrenador que prepara muy bien sus partidos, un gran estratega y con jugadores de mucha calidad, que acumulan una gran experiencia europea”.

La baja de Causeur y el estado físico de la plantilla. “Hemos decidido parar a Causeur porque llevaba arrastrando molestias en un tendón de una rodilla y una fascitis en la otra pierna, hemos decidido pararle por todo el esfuerzo que estaba haciendo, en previsión de que pudiera caer lesionado. Vamos a ver cómo evoluciona de esas dos lesiones que le estaban impidiendo rendir al nivel que él quería. Williams-Goss está entrando muy poco a poco con el equipo después de mucho tiempo parado y no va a jugar mañana, seguramente. Hanga sí, porque ha evolucionado muy bien y será de la partida”.

Tiempo de baja de Causeur. “La fascitis plantar no tiene un tiempo de recuperación muy preciso, a ver cómo evoluciona, habrá que tener paciencia. En otros momentos de la temporada pararemos a otros jugadores porque la exigencia es muy grande. Ojalá sea el menor tiempo posible”.

¿Hay más dudas tras la derrota en Vitoria? “No, cada partido es una historia. Habrá dudas, momento de buen juego, momentos peores, partidos perdidos, eso va a pasar durante el año y siempre ha sido así. Lo más importante es que nosotros no perdamos el rumbo y que estemos tranquilos, que hagamos las cosas bien hechas y que conozcamos cuál es el objetivo. Hace un mes ganamos el primer título y ahora estamos avanzando y dando pasos adelante en una carrera que no es de las de obtener un resultado inmediato. Vamos a ganar y a perder, pero eso no nos puede hacer dudar del trabajo. Esto es una carrera de fondo y debemos estar preparados para el próximo título que se presente, para jugar la final. Debemos tenerlo claro y también la paciencia suficiente para entenderlo desde el primer momento, por lo menos los de aquí dentro”.

La relación de Chus Mateo con Scariolo. “Sergio es un entrenador muy contrastado, lo conocí en 1999 y hemos trabajado codo con codo durante seis años, mañana, tarde y noche en el Real Madrid, el Unicaja y la Selección. Es una persona supertrabajadora, detallista, meticulosa, un gran estratega, no deja nada al azar y en eso sigue igual, no ha cambiado nada. Luego todos evolucionamos y después de tantos años seguro que ahora es mejor. Los entrenadores tenemos nuestra parte e importancia en todo, pero al final los de verdad importantes son los jugadores, en la Virtus y en el Madrid. Para el partido tendremos que defender bien a sus jugadores y saber qué puntos débiles tiene la Virtus”.

Recuerdos junto a Scariolo. “Anécdotas tendría mil. El año que yo lo conocí ganamos una Liga en el Palau, que nadie daba un duro por nosotros. Recuerdo que empezamos mal, que en la Copa nos eliminaron en cuartos de final. Luego fuimos avanzando y sufriendo mucho, pero la tenacidad y la constancia nos hizo ganar el quinto partido en el Palau, aquella Liga que la gente recuerda como la de Djordjevic y en la que Sergio tuvo un papel importante”.

El regreso de Shengelia, ¿cambia la Virtus? “No lo sé, cuando entre vamos a ver cómo funciona la Virtus. Es un jugador extraordinario y cuando esté tendrá mucho protagonismo. Ahora juega muchos minutos al cuatro Jordan Mickey, que también tratará de sacar fura a Tavares como cinco. Cuando entre Shengelia será un problema distinto, porque es un jugador totalmente diferente a Mickey, a ver cómo evoluciona la Virtus con Shengelia. Es un equipo que defiende bien, que se está buscando, pero que tiene también sus puntos débiles”.

El plan ante la Virtus. “Tenemos que tener menos altibajos, tenemos que cometer menos errores no forzados, de concentración. El día del Baskonia era un partido que podíamos acabar punto a punto, como así fue; de hecho, al último minuto entramos con un punto de ventaja. En el último cuarto perdimos un poco el rumbo concediendo demasiados triples. Hay que tener claro el objetivo, seguir trabajando y ser constantes. Y mejorar, claro, las cosas que tenemos malas y potenciar las buenas”.

¿Le preocupa la unidad en el juego? “Esto va a pasar, hay que reconducirlo cuando salga mal. Nosotros siempre intentamos tocar pintura primero, bien sea al poste bajo, con penetración o con una segunda entrada, ser agresivos ahí para tratar de lograr espacios y conseguir tiros abiertos. Si te conviertes en un equipo demasiado perimetral das facilidades al rival. Hay importancia entre el equilibrio defensivo y ofensivo. A veces decimos que defendemos mal porque nos están metiendo muchos puntos, pero si atacáramos mejor el equipo contrario sacaría más veces debajo de canasta y no tras un mal tiro y estaríamos mejor colocados para hacer un buen balance defensivo. El baloncesto siempre se juega desde dentro hacia afuera y esa era la demanda ante el Baskonia (en un tiempo muerto concreto)”.

¿Qué sensaciones percibe en el equipo? “Las sensaciones de los jugadores son buenas, tienen en la cabeza querer ganar cada partido. Hemos ganado, perdido, hemos estados con dudas, jugando mejor o peor, de corrido. Ahora se trata de encontrar la regularidad que nos gustaría, porque tenemos altibajos en un mismo encuentro y de uno para otro y lo subsanaremos con trabajo. Hay que trabajar cada día para que se note lo que hacemos”.