Crisis de Juancho y dudas en el megaproyecto del Panathinaikos

Malas noticias para el Panathinaikos. El megaproyecto formado en Grecia con la intención de asaltar los cielos y conquistar la Euroliga ha empezado muy mal la máxima competición continental. En el puesto 15 de la clasificación (de 18) el récord de 1-3 refleja, no sólo una pequeña crisis de resultados, también que las piezas no encajan y las sensaciones son malas. Con Ergin Ataman expulsado (séptima expulsión desde 2007, el que más de la Euroliga desde dicho año) en el último partido (derrota en casa ante el Maccabi por 81-86), la plantilla parece desmadejada y sin química. Y si bien no es bueno sacar conclusiones precipitadas en los inicios, los griegos tienen motivos para preocuparse y deberán espabilar rápido para no tener problemas y descolgarse de los favoritos.

La derrota inicial ante el Olympiacos (78-88) no hizo saltar las alarmas por ser un partido competido y resuelto en la prórroga, al final, con una sensación de que cualquiera de los dos equipos se lo podría haber llevado. Muchos hicieron referencia al récord de 18-1 que los últimos finalistas de la Euroliga tienen ante su eterno rival en un derbi griego en el que los nervios siempre están a flor de piel. Luego llegó una victoria (sin demasiado brillo) ante el Bayern de Pablo Laso y todo volvió a su cauce, sin que nadie se pusiera nervioso (78-71). El 1-1 daba tranquilidad y las victorias en la Liga griega ante el Maroussi y el Peristeri inclinaban la balanza a favor del proyecto.

Pero las dos últimas derrotas en la Euroliga han sido demasiado duras: el Fenerbahçe aleccionó a los griegos con un 27-9 en el primer cuarto que fue 83-69 al final, haciendo inútiles los intentos de recuperarse de sus rivales en Turquía. Y la derrota ante el Maccabi israelí en casa (81-86) con Ataman expulsado y desquiciado han demostrado que hay un problema de fondo en el proyecto y más nervios de los que se quieren reconocer. La desesperación se apoderó de un entrenador ya de por sí provocador y caliente, al que ya le vimos excederse en el banquillo del Efes en el pasado más reciente. Y demuestra que las dificultades son notorias y que hay que prepararse bien para lo que viene: reciben al Lavrio en la Liga griega, al Baskonia en Euroliga, visitan al Olympiacos en la competición doméstica y juegan contra el Barça (imbatido en Europa) en el Palau. Mala cosa.

Problemas para Juancho

Acorde con el nivel del Panathinaikos, Juancho Hernangómez, uno de los fichajes estrella del proyecto procedente de la NBA, está teniendo muchas dificultades. Ante el Fenerbahçe acabó con 0 puntos en casi 21 minutos (-16 con él en pista); contra el Maccabi, finalizó con tan sólo 1, 0 de 3 en triples y un -11. Con pocas opciones y sin brillar en ninguno de los dos lados de la pista, Juancho no carbura, tiene dificultades, apenas tiene oportunidades en la ofensiva y tampoco se muestra especialmente cómodo con el sistema de Ataman. Algo que, al final, se tiene que hacer ver el propio entrenador. Al fin y al cabo, es el encargado de liderar un proyecto millonario a un título que ahora mismo queda muy lejano. Tanto en los sueños como en la realidad.

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