Los clubes israelíes abandonan la FIBA Europe Cup

En un comunicado conjunto, los clubes israelíes Bnei Ofek Dist Herzliya, Ironi Ness Ziona y Hapoel Galil Elion anunciaron su salida de la FIBA Europe Cup tras las pocas soluciones otorgadas por la FIBA para poder disputar sus partidos fuera del territorio del país, en plena guerra frente a Hamas.

“En las últimas semanas hemos hecho muchos esfuerzos, económicos y profesionales, para poder seguir participando también este año en la Eurocopa. Estos pasos surgieron de una comprensión de la importancia de que los equipos israelíes siguieran compitiendo y representando a Israel, y el significado que podría tener en el futuro para los equipos israelíes si nos retiramos unilateralmente. Estos esfuerzos fueron compartidos en parte por los dirigentes sindicales, el Ministro de Cultura y Deportes, Miki Zohar, e incluso el Ministerio de Asuntos Exteriores. Desafortunadamente, nos encontramos con una falta de cooperación y deseo por parte de FIBA de ayudar o encontrar alguna solución que permita a los equipos continuar compitiendo en la fábrica, y hoy recibimos un mensaje de FIBA que no lo haríamos. Si aprobamos sus términos de hospedaje, verán esto como nuestra decisión de retirarnos de la fábrica”, reza la nota de los conjuntos israelíes.

“En una acción muy desconcertante y sin ninguna petición por nuestra parte, los equipos, pero aprovechando cínicamente el llamamiento del sindicato israelí a su homólogo chipriota - que entregó una carta en la que las condiciones eran imposibles para que los partidos se celebraran en él - FIBA dio su visto bueno únicamente a este formato, en el que los equipos israelíes estarían obligados a jugar todos los partidos de su “casa” en Chipre entre el 6 y el 17 de noviembre y bajo las restricciones de que sólo se permitirá un partido por semana ( algo que ni siquiera es matemáticamente posible). A los equipos no se les permitirá permanecer en Chipre entre los partidos y se verán obligados a llegar el día antes del partido y salir al día siguiente”, continúa.

“En las últimas dos semanas hemos intentado, a través del sindicato y también directamente, ofrecer una serie de alternativas, incluida la celebración de todos los partidos en casa en Bulgaria con la ayuda de la Liga Balcánica que acudió en nuestra ayuda, celebrando todos los partidos de los equipos israelíes fuera de casa mientras participan en los costos con los equipos anfitriones, pero la FIBA se negó una y otra vez a aceptar estas alternativas y nuevamente envió cartas a los grupos con una fecha límite en la que deben confirmar su acuerdo con las condiciones de alojamiento en Chipre. Las condiciones antes mencionadas son técnicamente imposibles, incluso si quisiéramos, y conducirían inevitablemente a una serie de pérdidas técnicas y la pérdida de cualquier valor deportivo de participar en el evento. Parece que la conducta de la FIBA en las últimas dos semanas fue diseñada para sacarnos de la competición y por el deseo de ver a los equipos israelíes allí, y desafortunadamente parece que estos esfuerzos han dado frutos”, prosigue.

“Estamos dolidos y decepcionados por la decisión de la FIBA, que hizo que los equipos israelíes en la Euroliga estuvieran entre los equipos israelíes que recibieron infinitas condiciones y paciencia en comparación con la actitud, las alternativas, las exigencias y el plazo que se nos había fijado. Como clubes con un pasado honorable en la FIBA y en la Champions League en particular, esperábamos recibir una actitud mucho más comprensiva e inclusiva. En tiempos como estos, el baloncesto y los deportes deberían ser un puente de paz que conecte a personas y culturas, y estamos decepcionados de que se nos haya negado el derecho a cruzar ese puente. Pedimos disculpas a nuestros fans, a quienes esperábamos darles algo de consuelo y escapar de la dura realidad que se nos impuso a todos durante el último mes; también hicimos todo lo posible por ustedes”, señala.

“Estamos fortaleciendo el frente interno y a nuestros soldados, y esperamos regresar pronto y representar a nuestros fanáticos y a Israel”, cierra.

La FIBA no se ha pronunciado aún tras este comunicado, por tanto, se desconoce las repercusiones deportivas que podría tener esta decisión.

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