El Bilbao Basket sigue inmaculado en Europa
Partido con muy poca tensión y muchos errores en Bosnia ante el Igokea que se anotó al final con oficio el cuadro de Ponsarnau. Los vizcaínos (3-0) sacan dos victorias al resto.
El partido de hoy en Bosnia no pasará a la historia del baloncesto, eso es evidente. No había más que presenciar el final del mismo. Solo sonreía Andersson, el único que no actuó, por la lesión en el muslo, junto con el chaval Barandalla. La realidad de la Champions hoy en día, por mucho que se quiera vender que la competición está creciendo y que deslumbra la Final Four, es que un equipo como el Bilbao Basket humilde, en construcción y aún con muchas lagunas, resulta muy superior, casi una apisonadora, ante los tres que completan su grupo. Con su potente 3-0, ya saca dos triunfos a Bahcesehir, Igokea y Nymburk, que se pelearán por la segunda plaza. Con ganar los dos partidos de Miribilla le vale de sobra para ser líder y certificar el Top-16. Apuntaló esa primera plaza momentánea con una faena en la que fue creciendo en solidez. Entre ACB y BCL lleva un 6-3, pero hay cuestiones que aún inquietan.
El Igokea, en una cancha semivacía, también era un grupo amenazante, sobre todo porque si entran en calor hombres como Waller, tienen puntos en las manos y un juego alegre, basado en el tiro exterior, en acciones de uno contra uno de sus norteamericanos. Andersson no jugó finalmente y no viajó Radicevic. Para el Bilbao Basket es importante emplear la BCL para recoger los pedacitos de jugadores con la moral por los suelos, como Francis Alonso y Smith. Pero no se ha dado el caso. Para el exUnicaja será bueno ir a con la Selección a la próxima Ventana para cambiar la dinámica y limpiar la cabeza, porque está absolutamente bloqueado. Al menos se sacó algo la espina con un triple decisivo: 78-85 dentro del último minuto. Y no se puede decir que el norteamericano no lo intente, pero su miopía empieza a ser dramática. El que es una garantía absoluta y todos saben que no falla es Hakanson, una vez más estelar.
RESUMEN
Surne Bilbao Basket (24+24+24+13): Hakanson (16), Alonso (5), Rabaseda (2), Rosa (17) y Withey (11) -cinco inicial-; Ubal (8), Smith (10), Reyes (6), Sulejmanovic (2) y Kyser (8).
Parciales: 26-24, 49-48 (descanso); 66-72 y 80-85 (final).
Árbitros: Árbitros: Martin Horozov (Bulgaria), Nicolas Maestre (Francia) y Mihkel Männiste (Estonia). Eliminados por faltas Sulejmanovic (m.40).
Incidencias: Partido de la tercera jornada del Grupo D de la Liga de Campeones, disputado en el pabellón Laktasi de Aleksandrovac ante cerca de un millar de espectadores.
Las caras no parecían de felicidad absoluta tras el bocinazo final, porque aún persiste la preocupación de que este equipo debe apretar mucho más en la transición defensiva, ya que acompañan a los rivales, no bajan con la tensión de debida. Los inicios siguen siendo muy pálidos, permiten a los enemigos encontrar su punto de ambición e inspiración ofensiva, y eso luego pasa factura a nivel mental. A veces las desconexiones desesperan a su técnico. Cuestiones como el rebote son otro de los apartados que hay que trabajar. Los regalos con segundas opciones son un lastre. El Bilbao Basket jugó en plan pachanga en el primer tiempo y se puso el mono de trabajo en el segundo para decidir. De aceptar 49 puntos en el primer tiempo a 31 en el segundo, eso fue clave.
Los ‘hombres de negro’ querían jugar en Europa por varios factores. Por prestigio, escaparate para posibles fichajes y recorrido de toda la plantilla. Rosa, por ejemplo, tiene una competición en la que lucirse. Y bien que lo entendió en un primer tiempo colosal, con sus tiros abierto. El habitual jugador de complemento quiso sacar la bandera de actor principal. Era el sorprendente máximo anotador del Surne al descanso, con 17 puntos anotados sin fallo y 5 de 5 en triples. Por su lado, Radaseda lo mismo hace un derbi con anotación que un choque intercontinental con rebotes por doquier (10). El cuadro bosnio aprovechaba las facilidades para entrar hasta la cocina, muchas veces con canasta y adicional. Waller y Stephens se pusieron las botas. La ventaja creció hasta el 22-15.
El partido era desordenado, un correcalles, el caos, con mucha canasta fácil, al rico triple... la tensión brillaba por su ausencia. Las lagunas se iban alternando: siete rebotes ofensivos concedidos en el cuarto inicial, tres acciones de canasta y adicional en el siguiente, seis pérdidas después... hasta que alguien dijo basta. Esdecir, hasta que el Bilbao Basket sacó la etiqueta de equipo ACB y empezó a trabar el juego. Una canasta de Ubal justo sobre la bocina de final del tercer cuarto era notaria de que el equipo estaba mucho más metido: 66-72. Buenos minutos del internacional uruguayo. Kyser, muy poco contundente, dejó su sitio a un Withey más fiable y los vizcaínos mostraron muchas más certezas en el tramo definitivo que su rival, que falló tires libres muy sabrosos. Saben que la faena es larga, que hay 40 minutos y conjuntos de ligas menores se van desangrando. El equipo del vehemente Bagic, con un día gris de Crawford, se quedó de piedra, sin respuestas en el suspiro final. Lo mejor fue implicar a muchos jugadores para recobrar la energía y la intensidad, esos ingredientes con los que no arrancaron. Creyeron una vez más y Smith demostró que nunca va a dejar de insistir. Que pase el siguiente.
Ponsarnau: “Lo bueno es que hemos sabido vivir el partido”
Jaume Ponsarnau se ha felicitado por la victoria que la logrado su equipo en Bosnia ante el Igokea m.tel para apuntalar el liderato del Grupo D de la Champions. “Lo bueno es que hemos sabido vivir el partido y a 40 minutos sabíamos que poniendo energía y jugando con el máximo de jugadores posibles podíamos ganar. Hemos creído y a pesar del mal inicio hemos encontrado la forma de ganar este encuentro”, dijo al final del choque.
El técnico catalán, no obstante, ha admitido que su equipo ha arrancado el partido sin “la intensidad adecuada”, lo ha aprovechado el Igokea para hacerle “mucho daño en el rebote ofensivo”. “En el primer cuarto, de las ocho opciones posibles de rebote nos han cogido siete y encima han encontrado eficiencia y jugadores inspirados que les han ayudado”, lamentó.
Aunque también se congratuló de haberse “mantenido en el partido” en los momentos complicados de la primera mitad “encontrando acierto especialmente de Rosa desde la línea de tres puntos” para poder lograr posteriormente una victoria que les permite tener dos triunfos de ventaja sobre los otros tres equipos del grupo tras las tres jornadas de la primera vuelta de la fase regular.