Bochorno en el baloncesto español: zancadilla del técnico del Huesca a un rival

El baloncesto español vivió el pasado 9 de noviembre un capítulo bochornoso. Uno de los precedentes más conocidos en el deporte español tuvo lugar en 1986, en un Elogorriaga Bidasoa-Teka Cantabria de balonmano. Con el partido casi finalizado y el marcador 17-17, el entrenador local, Juancho Villarreal, placó en pleno contraataque al extremo Nacho Silos. Fue expulsado, pero su equipo defendió y luego pudo marcar, para ganar 18-17. Ese triunfo fue clave para que Elgorriaga ganara la liga. Juantxo recibió 12 partidos de sanción. Pero un poco más cerca en el tiempo, en la temporada 1999-00, en fútbol, Martín Montreal, cuando estaba el frente del Leganés, cortó en la banda un contraataque del Badajoz en Segunda División desviando el balón con una patada. Recibió diez partidos se sanción y una multa de tres mil euros.

Hace 12 días en un Lobe Huesca La Magia-Zornotza de Segunda FEB, la tercera categoría del baloncesto nacional, el técnico local Rafa Sanz protagonizó un hecho insólito. El escolta norteamericano del equipo vizcaíno Cardaci se estaba moviendo junto a la banda donde permanecía el entrenador y este sacó el pie para zancadillearle, de tal forma que lo derribó. El técnico está dando indicaciones con los brazos en alto junto a la línea y se ve cómo hace el gesto de forma intencionada. Tras quedar desequilibrado, el jugador cae y se reincorpora. Estos días ha comentado, antes de ver las imágenes, que no protestó porque pensaba que había tropezado o chocado con alguien. Luego ha visto la acción y se ha quedado perplejo. En el momento de la caída, no hay nada más. La jugada termina con un triple visitante y apenas hay una mirada del jugador hacia el banquillo. La acción tuvo lugar a 3:47 para acabar el choque, con empate a 70. El pulso concluyó con 85-80 tras una prórroga.

Rafa Sanz destacaba ayer que no hay que “dar pábulo” a esta situación y señala que es una acción totalmente “fortuita”. En redes sociales, Mazaira, jugador del Zornotza, destapó la imagen y afeó la actitud, señalando que no busca ni justicia ni consuelo, sino que estas acciones “no queden impunes”. “Esto mancha nuestra profesión”, destaca. El presidente del club zornotzarra, Joxe Etxebarria, ha levantado la voz: “Es una acción impresentable. La sanción tiene que ser ejemplar para que no vuelva a suceder porque si es una sanción light, de uno o dos partidos, puede ocurrir que los jugadores o los entrenadores se tomen la justicia por su mano. Eso no puede ser. Los entrenadores tienen que ser un ejemplo, y esto que hemos vivido es absolutamente antideportivo”. Desde la FEB se ha comunicado al club vizcaíno que se ha trasladado el caso al Comité de Competición.

Rafa Sanz ya protagonizó alguna polémica en el pasado. En 2006, cuando dirigía a La Palma, perdió los papeles en una comparecencia posterior a un choque en León de LEB. Los árbitros le expulsaron en el minuto 22 por insultar a los componentes de la mesa. El entrenador se negó a abandonar la cancha y el delegado de campo llamó a las fuerzas de seguridad para que lo evacuaran. “No soy ni Santa Teresa ni el Dioni, que robó, se rio de toda España y ahora esta en la calle”, arrancó. Luego se despachó a gusto contra el delegado, Pepe Estrada: “Un mindundi ha querido hacer de Blas Piñar y mí eso me da asco. Es una pena que con lo que se ha luchado en este país por la democracia haya tanto facha de mierda suelto por ahí”, prosiguió. Y luego se refirió a los componentes de la mesa: “Los árbitros me expulsan a instancias de una mesa que puede deber favores sexuales cualquiera del Baloncesto León”. Confesó que cuando se retiró del campo con una pareja de la Policía Nacional no pensó nada nada “porque he estado tres años trabajando en el talego”.

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