Ataman desata la polémica y Turquía sucumbe a la locura

El grupo A está que arde. Tiflis acoge los encuentros de los equipos que luchan contra España por un hueco en los octavos de final del Eurobasket 2022, y en esa ciudad se ha impuesto la anfitriona, Georgia, en un enfrentamiento absolutamente titánico: dos prórrogas, una cantidad ingente de errores, polémica y locura. Hubo de todo: peleas, objetos arrojadizos por parte de los aficionados, expulsiones, triples imposibles y fallos que marcaron el devenir de un partido que España, derrotada ante Bélgica en la tercera jornada, miraba de reojo: en caso de victoria turca, su clasificación para octavos era virtual. Ahora, ocupa la cuarta posición del grupo, aunque sigue dependiendo, claro, de sí misma.

El partido llegó a hacerse incluso largo: a menos de 5 minutos para la conclusión y con una ventaja de 3 puntos para Georgia (59-62), Furkan Korkmaz y Duda Sanazde se engancharon y fueron expulsados por los colegiados. Durante la refriega y posterior revisión, Turquía se quejó tras el encuentro de que se descontaron 22 segundos en el reloj. na situación bastante incómoda para el Eurobasket y que no hace otra cosa que aumentar las dosis de polémica. Volviendo a la refriega, en ella estuvieron involucrados jugadores de ambos banquillos... y el público, que participó lanzando cosas a los baloncestistas, una imagen lamentable en una pista de baloncesto. El choque estuvo un buen rato parado, pero se reanudó para confirmar primero una prórroga y después otra. Los fallos se sudecían, las muestras de talento individual eran lo único que daba algún tipo de ritmo a la tarde y daba la sensación de que el final no llegaba. Un claro error: antes o después, todo se acaba.

Un pase de Thaddeus McFadden que tuvo como recipiente a Sandro Mamukelashvili (20 puntos y 12 rebotes en casi 45 minutos, el mejor del partido), forzó la primera prórroga. Cedi Osman no pudo evitarlo. Con 74-72 favorable a los turcos, el propio McFadden convirtió un triple imposible, pero erró en sus dos intentos posteriores y un solitario tiro libre de Alperen Sengun, compañero de Usman Garuba en Houston Rockets, sirvió para alargar el choque 5 minutos más. Sengun acabó, por cierto, con 21 tantos y 9 rechaces, siendo el mejor de los suyos junto a Sertac Sanli (15+9). De nada sirvió.

En la segunda y última prórroga acabó el partido: con 81-84 para Georgia, Turquía tenía la oportunidad de defender y tener después la posibilidad de forzar un nuevo tiempo extra a través del triple. Sin embargo y tras visitar el Instant Replay, los árbitros consideraron antideportiva una falta de Cedi Osman que, a la postre, provocó la expulsión de Ergin Ataman tras sus continuas quejas. Una situación que no hizo más que alargar la situación con protestas y repeticiones y que puso, tiros libres y posesión mediante, un 81-88 ya insalvable y que sólo se pudo compensar con una solitaria canasta de Sengun que valió para poco. Para lo que sí fue útil el encuentro fue para poner el grupo A patas arriba. En esas estamos.