Andrés Feliz lidera al Joventut para tomar el Buesa

Uno de los disfraces que más se ha visto en los Carnavales de Vitoria este fin de semana ha sido el de Chima Moneke, ídolo del Baskonia. Rastas, trenzas, cintas de pelo, gafas y camiseta del equipo. El jugador, que es un personaje que empatiza mucho con la grada, agradeció el gesto, pero pidió a los aficionados que no se pintaran la cara de negro. Jordan Theodore le apoyó en ese planteamiento. El nigeriano no pudo dedicar la victoria a su afición. Howard, máximo anotador de su equipo, tampoco.

Los dos conjuntos sumaban doce victorias antes del compromiso. El Baskonia tuvo las bajas de Sedekerskis y Diop pero Chiozza no hizo ya la ronda de calentamiento y tampoco compareció en el partido. En el Joventut, ausencias de Andrew Andrews y de Miguel Allen. La Penya fue la bestia negra el año pasado para los vitorianos y sigue siendo un equipo que se le atraganta al conjunto vasco. Le eliminó a las primeras de cambio en la Copa del Rey y le sacó también de la competición en los Playoff por el título de liga.

El primer cuarto fue claramente para los catalanes. Vives, de tres en tres, y Tomic con la primera canasta interior, empezaron a poner la diferencia en el marcador. Con un Feliz inspirado llegó el 2-11 (min. 3). Los dos equipos jugaban sin hacer faltas (una cada uno para el minuto 4) pero la iniciativa fue siempre peñista. Un buen final de Moneke y Raieste dejó las cosas en un 18-22. El Baskonia apenas juega interior y los rivales le conocen de sobra. Es un equipo bastante previsible en ese sentido.

Ivanovic salió con Miller Mc-Intyre y Theodore en el quinteto titular de la segunda entrega. Con el 18-28 quedó en evidencia la superioridad badalonesa. El Baskonia tardó dos minutos en anotar en el primer cuarto y tres en el segundo. Moneke era el motor ofensivo pero Kraag también respondía con grandes canastas (24-39, min. 16). Un buen final de Markus Howard dejó el tanteador en un 36-43 cuando todos se marchaban al descanso. Pero los badaloneses llevaron la iniciativa en el tanteador en todo momento.

El Baskonia se aproximó a un punto con el 51-52 (min. 24) gracias a un gran Kotsar y a los triples de Howard. Pero Moneke se lesionó, con un golpe en la rodilla derecha, y el Joventut se fue en el luminoso con el 51-58. Codi intentó echarse el equipo a la espalda pero la Penya, con un baloncesto coral, no permitió aproximaciones sensibles. Y eso que Carles Durán fue castigado con una técnica por protestar. Nueve de diferencia, en cualquier caso, para afrontar los últimos diez minutos de partido.

Matt Costello, con dos triples seguidos, abrió la caja de los truenos (65-70, min. 34). Feliz y Tomic siguieron percutiendo cuando Moneke, a falta de 4:21 para el final, regresó a la cancha. Ayudó para el empate a 78 pero un gran Feliz puso la puntilla al duelo con un triple frontal muy mal defendido. Raieste y el propio Moneke, sin embargo, no anotaron los suyos y la Penya se llevó una merecida victoria en el templo azulgrana. También el average particular porque ganó en la primera vuelta en Badalona 77-72.