Savané: “Decir que es un fracaso no estar en la Copa es faltarle al respeto a muchos equipos”

Desde que el jugador más importante de la historia de la historia del Gran Canaria se convirtió en presidente del club de su vida, acumula todavía más horas de vuelo de las que por sí arrastraba una maleta llena de vida, baloncesto, formación y amor por África y su “segunda tierra”. El frenesí navideño en el que se ha visto inmerso tendrá su colofón este domingo en el WiZink. Le espera “un transatlántico”. “Para jugar contra el Madrid tienes que tener clarísimo lo que es tu identidad y tener la concentración y el nivel físico para aplicarlo el mayor tiempo posible. Es un transatlántico, puedes hacer todo eso e igualmente perder sin tener ninguna oportunidad. Pero si no estás así, tienes cero opciones de ganar”, desvela Sitapha Savané.

Reconoce que lleva “unos meses de transición”, pero cada día está cerca de llegar al punto deseado. “En estos meses el llegar al Granca ha sido como hacer la mili, y a pesar de venir preparado siempre te encuentras muchísimas cosas, obstáculos, retos que superar. Ahora, después de cuatro meses, me siento totalmente cómodo con la versión de Taph presidente”, aseguraba este “afrocanarión”, como le gusta definirse.

Un rato de conversación con él te transporta a su infancia en Senegal. Al crecimiento paulatino del Gran Canaria. A la discriminación hacia la emigración de sus compatriotas. “Ningún ser humano que vaya a cualquier sitio a buscarse la vida es el enemigo. Las migraciones han existido siempre”, insiste. También viajamos al año 2011. Se rompió el Aquiles y 24 horas después estaba apoyando al Granca en vivo en la Copa por una cuestión de valores: “Este era el nivel de implicación, y esto es lo que transmito. La implicación tiene que ser la máxima posible”. No jugarla este año “no será un fracaso”. Hay matices que podrán leer a continuación:

¿Qué no faltó en su carta a los Reyes Magos?

He pedido mucha salud. Ya no solo, obviamente, para mi familia y uno mismo, sino para el todo el mundo ahí (Gran Canaria). Creo que ese es el punto número 1 en la mayor parte de cartas, especialmente de adultos. En la parte personal, después de unos cuantos meses de transición, acabar de reencontrar el equilibrio, por decirlo así. Han sido meses de muchos cambios. Y en la parte más profesional, que el equipo mantenga una senda para cumplir con los objetivos que se han marcado y que a nivel de club sigamos en esta transición en la que estamos embarcados hasta llegar a buen puerto.

¿Cuál es su balance de estos cuatro meses como presidente del Granca?

Hago un balance bastante positivo. La primera parte, a nivel personal, entras en una posición totalmente nueva, lo que conlleva un periodo de adaptación. Quieres, cuanto antes, hacerte conocedor de toda la situación del club, poder hacer un diagnóstico acertado de la situación, algo que sí que siento que se ha conseguido en estos cuatro meses. No solo esto, sino que ya se ha empezado a poner los cimientos para, digamos, “solucionar” los problemas que se identifican y también empezar a aprovechar las oportunidades que estaban por ahí sin aprovechar.

No solo por estadísticas, sino por lo que implica su figura, es usted el jugador más importante de la historia del club. Siempre será el “eterno capitán”. ¿Le costó mucho cambiar el chip?

No creo que tanto, la verdad. Yo venía muy mentalizado, no es que dejara de jugar un día y al siguiente fuera presidente. Iba en una línea de ver el baloncesto desde fuera de la pista, tanto la parte del juego como la del negocio en general. Tenía ese interés y lo había estudiado antes y ahora. Venía con este enfoque de tratar más con la gente de fuera de la cancha que con la de dentro. Ahí me sentía bastante preparado, pero al final nunca lo estás lo suficiente. Por eso hay transiciones. En estos meses el llegar al Granca ha sido como hacer la mili, y a pesar de venir preparado siempre te encuentras muchísimas cosas, obstáculos, retos que superar. Ahora, después de cuatro meses, me siento totalmente cómodo con la versión de Taph presidente.

El día que fue anunciado como dirigente, y según lo visto estos meses, insistió mucho en la necesidad de hacer un trabajo social con el club.

Una parte importante pasaba por ahí, pero a eso me refería con la respuesta anterior: luego llegas y ves que la realidad es que tienes que hacer mucho más porque es una parte que se ve públicamente, que es la que has mencionado, pero no es ni siquiera la que coge el 30% de tu día a día. Hay un aspecto, literalmente, de director general que uno acaba haciendo porque tienes que poner tu sello en el club, transmitir a todos tus directores, tus trabajadores, todas las líneas generales que quieres que sigan. Esto no se consigue en pocos meses. El trabajo de esta primera temporada, me di cuenta rápidamente, era el de hacer el club a tu imagen, a la imagen que quieres y a lo que quieres que sea el club. Esto requiere estar en el día a día con los trabajadores.

A nivel deportivo, actualmente el equipo va 7º en Liga Endesa y 2º de grupo en la Eurocup. ¿Cómo le sientan ambas clasificaciones?

A nivel deportivo, que es donde menos incidencia, al menos en esta primera temporada, debería tener, creo que estamos en una posición muy buena, otro año más, en Eurocup. En liga empezamos como un tiro. Pero luego, como sabemos lo que conocemos esta la Liga Endesa… Lo decía cuando íbamos terceros, con 7-2: cada semana sacaba un pantallazo. Era mi forma de decir: “Sabemos de sobra que esta no es nuestra posición natural ni estaremos ahí”. Nuestra batalla es la de luchar, como X equipos, para intentar meternos en la Copa del Rey, estar de nuevo en el playoff, ir construyendo desde ahí a nivel deportivo un proyecto. En esta línea estamos.

Usted conoce muy bien lo que significa la Copa para un club como el Granca. Inolvidable fue, por ejemplo, su aparición en el hoy Wizink un día después de operarse de la rotura del talón de Aquiles. ¿Sería un fracaso o una decepción no estar en Badalona?

Una decepción, sí. Un fracaso… Creo que decir eso sería faltarle el respeto a muchos otros clubes que están en un nivel deportivo similar al nuestro y que también están ahí con ese mismo propósito. Cuando quitas los equipos de Euroliga, siempre digo que después hay quizás ocho que al empezar la temporada tienen clarísimo que quieren estar en la Copa, se les exige estar ahí. Creo que lo importante es tener la ambición, el hambre en cada momento por estar ahí. Luchar y demostrarlo cada día, en cada partido. Si haciendo esto no estás no hablaría de fracaso, pero si no lo has hecho la decepción sería muy grande. No el hecho de no estar, sino el no luchar con el hambre suficiente cada día por estar. Como has dicho, en nuestra época, donde teníamos esta mentalidad de equipo pequeño que quería demostrar, creo que se había visto de sobra. Está ese ejemplo que das: no estoy ahí por casualidad o porque me gusta el dolor un día después de estar operado.

Es que se había roto el Aquiles.

Sí. Me operaron el miércoles. El Granca jugaba el jueves y tuve que firmar un papel especial para que me dejaran salir del hospital. (Se ríe). Casi decían: “Si te fastidias, tú eres el responsable”. Este era el nivel de implicación, y esto es lo que transmito. La implicación tiene que ser la máxima posible. Sin con esta implicación, este trabajo, el hambre, no consigues los objetivos, nunca se puede hablar de fracaso.

El Granca se mide ahora con el Madrid, uno de los mejores equipos de Europa, al que usted además conoce perfectamente porque se enfrentó a él en la cancha. ¿Cómo se le puede hacer daño a una plantilla así?

Más que cómo hacerle daño… No voy a ser muy original: lo que tiene que hacer el Granca es ser fiel a la identidad que pide su entrenador desde el día 1. Los profesionales sabemos que para conseguir cimentar una identidad hace falta muchísimo tiempo, altibajos… Hemos empezado de luna de miel a nivel de resultados (se ríe), todo iba a bien, y ahora hemos tenido que vivir lo que es pasar por momentos malos. Para mí, las reacciones a los momentos malos es lo que al final te deja arriba o abajo. Para jugar contra el Madrid tienes que tener clarísimo lo que es tu identidad y tener la concentración y el nivel físico para aplicarlo el mayor tiempo posible. Es un transatlántico, puedes hacer todo eso e igualmente perder sin tener ninguna oportunidad. Pero si no estás así, tienes cero oportunidades de ganar.

En sus propias circunstancias, usted tuvo que emigrar de África, de Senegal, en busca de nuevas oportunidades. Ahora lleva muchos años en España. ¿Qué le parece que en este país haya innombrables opciones políticas y personajes que ven como enemigo a cualquier africano o africana que viene aquí en busca de una vida mejor?

Por mis valores, para empezar, no veo como enemigo a ningún ser humano que vaya a cualquier sitio a buscarse la vida. Las migraciones han formado parte de la historia de la humanidad. De hecho, así se ha conquistado el planeta. Si todo el mundo se quedase donde está, la mitad de la tierra no estaría donde se sitúa hoy. Creo que, como has dicho, hay motivaciones políticas detrás de este tipo de cosas. Como todo, la clave siempre vuelve a la educación de la gente: la que damos a nivel de familia, a nivel de colegios y demás para hacer ver que el de fuera no es el enemigo. No vale coger 2/3 ejemplos malos para intentar generalizar de manera negativa sobre alguna gente. Todavía peor es cuando se hace para unas ganancias políticas.

A la vista están las capacidades físicas que hay en África. Podemos hablar del Madrid, donde usted conoce perfectamente a Tavares, o Khalifa Diop, paisano suyo en el Granca. ¿Qué hace falta para que su continente pegue un pelotazo a nivel internacional? ¿Mayor inversión?

El talento físico es una cosa, pero para justamente explotarlo y sacar lo mejor de ello hay que tener estructura. ¿Qué hay que hacer? No hay que ir muy lejos: mirar el ejemplo de España. ¿Por qué España triunfa tanto a nivel deportivo no solo en baloncesto? Porque hay una estructura en todo el país, una organización, los niños y las niñas pueden practicar sus diferentes deportes en todas las partes del país desde muy pequeños con infraestructuras adecuadas. Este no es el caso cuando vas a África. Realmente, no empecé a jugar al baloncesto hasta los 13 años. ¿Por qué? Porque hay 2/3 canchas malas, fuera, en las que no podías practicar el baloncesto casi hasta que se pusiera el sol por las temperaturas que normalmente había. Jugabas al fútbol porque con un descampado y un medio balón de nada teníamos para jugar. Veo a mi hijo aquí, que desde que tiene 4 años ha podido estar en equipos, entrenar en canchas cubiertas, cada niño con dos balones para aprender a botar con las dos manos… Cuando llegue a los 13 años habrá tenido 10 de práctica de baloncesto. Es muy difícil competir contra esto por mucho que seas mejor físicamente. Sí, el físico es muy importante para el deporte hoy en día, pero no lo es todo. Es una apuesta que falta por parte de los gobiernos africanos, las federaciones… Hay que trabajar la base: es lo que después se ve arriba, como se ha visto en España.

Hace muy poco, un campeón de la NBA, Kendrick Perkins, bromeó de manera bastante obscena con la edad de Serge Ibaka, que además había sido compañero suyo en los Thunder. La respuesta de Ibaka estuvo más que a la altura. ¿Qué le parece que continuamente se ponga en duda la edad de sus compatriotas?

La respuesta de Ibaka fue perfecta. Es que encima es un ex compañero de equipo, algo que es mucho más feo. A este personaje se le conoce por la polémica y lanzar cosas así. Me alegro mucho de que Serge haya utilizado este momento no para ofenderse él sino para lanzar un mensaje que todos los africanos nos hemos visto obligados a lanzar. ¿Cuántas veces he aguantado yo esa bromita? Son cosas que, aunque lo hagas solo bromeando… Es como cuando hablamos de micromachismos: “Oye, mujer, no te pongas así. Es solo una broma”. Pues poca gracia tiene ya que, luego, estas bromas tienen consecuencias. Hay una estigmatización que se ha hecho de jugadores africanos. ¿Qué hay casos? Sí. Pero también con jugadores de fuera de África. Pero que esto se convierta en que si eres un jugador africano directa y automáticamente estás bajo sospecha, es una discriminación que no tiene a día de hoy ningún sentido. Y hay gente que, en determinadas posiciones, no puede entrar en este tipo de broma que me parece de muy, muy mal gusto.

Para acabar, una pregunta que podría perfectamente ser la primera. ¿Cómo le presentamos: un canarión de Senegal o un senegalés de Gran Canaria?

Siempre me defino como un “afrocanarión”. Y lo comparto varias veces con Edy Tavares, Petit Niang… Gente como yo. Hablo de africano, más que senegalés, porque así me siento. Obviamente, decimos canarión porque es donde hemos pasado una gran parte de nuestra vida y Gran Canaria es la isla que se ha convertido en nuestra segunda tierra.

Gracias, presidente. O gracias, capitán. Usted elige.

Acepto ambas cosas. De la misma forma que me siento africano y canarión me siento capi y presidente también (se ríe).

ASÍ LLEGAN

Real Madrid

Gran Canaria

CLASIFICACIÓN

Clasificación	PT	PJ	PG	PP
1 RMA	11	14	11	3
2 BAS	11	14	11	3
3 BAR	11	14	11	3
4 MAL	10	14	10	4
5 TEN	10	14	10	4

Clasificación	PT	PJ	PG	PP
5 TEN	10	14	10	4
6 JOV	9	14	9	5
7 CAN	8	14	8	6
8 VAL	7	14	7	7
9 BRE	7	14	7	7

PLANTILLAS

	Pos.	Altura	Edad
0 Nigel Williams-Goss	B	192	28
1 Fabien Causeur	A	195	35
6 Alberto Abalde	A	200	27
28 Guerschon Yabusele	AP	203	27
22 Edy Tavares	P	221	30
13 Sergio Rodríguez	B	191	36
23 Sergio Llull	E	190	35
8 Adam Hanga	A	199	33
31 Dzanan Musa	A	206	23
21 Petr Cornelie	AP	211	27
30 Eli Ndiaye	AP	204	18
17 Vincent Poirier	P	213	29

	Pos.	Altura	Edad
6 Andrew Albicy	B	178	32
8 Vitor Benite	B	194	32
9 Nico Brussino	E	202	29
0 Damien Inglis	P		27
2 Olek Balcerowski	P	215	22
4 Slaughter	B	191	35
5 Ferran Bassas	B	181	30
3 Jovan Kljajic	E	197	21
10 Miquel Salvó	AP	205	28
14 John Shurna	AP	204	32
18 Khalifa Diop	P	215	20
41 Oliver Stevic	P	204	38