Otro equipo de Euroliga pierde en Zaragoza

El Casademont Zaragoza se impuso al Valencia Basket de la mano de un gran Christian Mekowulu y cortó la racha de cuatro victorias que acumulaba el conjunto ‘taronja’, lo que le permite poner una distancia de cuatro triunfos sobre el descenso y ver como mengua su amenaza de forma importante. El pívot nigeriano catapultó a su equipo al triunfo con una gran actuación y acabó el partido con 25 puntos, 9 rebotes y 36 de valoración pero también fue un triunfo coral porque el resto del equipo acompañó de manera efectiva al africano.

Además de alejarse de manera clara de los puestos peligrosos de la clasificación el triunfo sobre el conjunto levantino conlleva la opción de pensar en luchar por alcanzar la competición europea ya que la pasada temporada la disputaron los doce primeros clasificados. El equipo aragonés, con la victoria ante uno de los equipos de la zona alta confirma su buen momento, que le ha llevado a ganar cinco de los últimos siete encuentros que ha disputado, lo que le ha permitido dar un salto importante en la clasificación hasta el punto de cambiar el objetivo de evitar el descenso por el de disputar competición continental.

El primer cuarto tuvo mucho ritmo, con ambos conjuntos intentando anotar rápido y con un gran acierto de los propietarios del terreno que lograron el 73 % de los tiros de campo, de los que 18 puntos fueron en la pintura y que, aún así, no les sirvió para ir por delante en el electrónico con una importante ventaja como podía parecer (24-22).

En el segundo parcial el acierto maño disminuyó pero el visitante no creció por lo que la situación en el marcador no varió excesivamente pues el Casademont Zaragoza compensó esa merma con una buena defensa ante un Valencia que puso el más apuros los ataques ‘rojillos’ también como demuestra el que éstos se fueron al descanso con diez pérdidas, seis en el segundo acto. La igualdad también fue máxima tras el tiempo de refresco con intercambios de canastas continuos con Christian Mekowulu por los locales y Bojan Dubljevic por los visitantes rivalizando en aciertos.

El conjunto de Porfirio Fisac se guardó lo mejor para el último cuarto en el que Mekowulu siguió destapando el tarro de la esencias bien secundado por Marcel Ponitka. El acierto del pívot empujó a su equipo e hizo que las diferencias que habían sido exiguas durante todo el partido comenzaran a crecer llegando a tener una máxima de 12 puntos (77-65) a falta de cuatro minutos para la conclusión. El Casademont Zaragoza supo manejar bien la renta ante un Valencia que quería pero no podía. Era la noche de Mekowulu, que logró sus mejores números desde que llegó a Zaragoza, y de su equipo.