Máxima tensión entre Madrid y Barça

La final de la Liga Endesa viaja a Madrid con 1-1, un resultado que le da una ligera ventaja a los de Chus Mateo. De los 14 precedentes en los que la serie por el título llegó empatada al tercer partido, en ocho (57,1%) el que terminó como campeón fue el equipo que no partía con ventaja de cancha, en este caso el Real Madrid. “Tenemos una gran oportunidad de ganar el título en casa”, dice Adam Hanga, uno de los jugadores que tomó este verano el Puente Aéreo de la Ciudad Condal a la capital española. “Todo el mundo sabe el hambre que tiene el Madrid por levantar esta ACB”, insiste el alero húngaro. De no conseguirlo, sería el segundo año seguido para el Madrid sin Copa, Liga ni Euroliga, algo que no ocurría desde la era pre-Laso.

Pero la final viaja a Madrid también con tensión. El Barça se impuso en ese segundo partido con algo de polémica. Los árbitros pitaron una falta de Tavares a Higgins (en la repetición parece que el caboverdiano roza ligeramente la muñeca del escolta cuando ya había soltado el balón), que le dio dos tiros libres al estadounidense, que no falló (71-69). El Madrid tuvo la última posesión, pero el triple de Causeur no entró y Rudy se hizo un lío tras capturar el rebote. Pitido final, victoria para el Barça y cabreo monumental de Yabusele que se encaró con uno de los árbitros, algo que no quedó recogido en el acta. “Hubo momentos de mucha tensión, que después derivaron en actuaciones de cierta intimidación hacia los árbitros”, afirmó ayer Josep Cubells, responsable de la sección. “Creemos y estamos seguros de que se tomarán medidas para que estas intimidaciones no vuelvan a suceder en los próximos partidos de esta final”.

Chus Mateo no quiso entrar en la polémica (“No hablamos de los árbitros, ellos son los jefes”), pero algunos jugadores madridistas sí que lo hicieron en redes sociales. “Los árbitros les han dado el partido otra vez… increíble. ¡No entiendo nada en absoluto! ¡Que los equipos decidan quién gana y quién pierde!”, comentó Williams-Goss, lesionado desde la Final Four. “Increíble... Es necesario parar esto”, añadió Yabusele.

En el apartado deportivo, buenas noticias para Chus Mateo que recuperó a dos jugadores tocados. Llull reapareció con buenos minutos (7 puntos en algo más de seis minutos en pista) y Abalde, que disputó 1:04 en el primer encuentro, jugó 8:10 en éste. Con Juan Núñez cómo único base (2:46), el Madrid volvió a confiar en Hanga, Causeur y Deck como unos improvisados.

En el Barça, Sanli (esguince de tobillo) estuvo 11 minutos en pista. “Si puede andar, tiene que jugar, ya habrá tiempo para recuperarse”, dijo Jasikevicius. Con tres extracomunitarios, el lituano deberá volver a hacer un descarte. Higgins es fijo y Hayes ha disputado los dos partidos, aunque en el último jugó poco (4:20). Exum ha sido el damnificado, algo que podría cambiar hoy. La final vuela a Madrid con máxima tensión en el ambiente.

ASÍ LLEGAN

Real Madrid

Barça

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