Harakiri del Leyma Coruña en su fortín

Una de las principales consignas del Leyma Coruña para esta temporada es vender cara su piel, sobre todo cada vez que juega en el Coliseum. En los dos primeros encuentros como local bordó la excelencia superando al Real Madrid 86-85 y barriendo de la pista con un abultado 110-87 a Casademont Zaragoza. Ante Unicaja, flamante líder de la ACB, hizo sudar tinta al equipo malagueño que consiguió ganar pidiendo la hora con un ajustado 83-90. Todo cambió en la cuarta jornada jugando en casa, en el choque contra Tenerife (62-87), en el que no salió a relucir el baloncesto al que acostumbraba a su público.

En los dos primeros cuartos del encuentro ante Tenerife, el equipo coruñés dio una lección defensiva consiguiendo frenar la producción ofensiva de los canarios, que se marcharon al descanso con 32 puntos en su marcador. En la segunda, todo lo ocurrido quedó en espejismo para el Leyma Coruña, con 55 puntos en contra para el equipo naranja, que terminaron por hundir sus opciones en el partido, castigados una y otra vez por el brillante pick and roll del equipo dirigido por Txus Vidorreta. Los coruñeses, en toda la segunda parte, no tuvieron una reacción acorde para poder frenar una sangría protagonizada por los exteriores e interiores insulares.

La superioridad canaria en el rebote fue otro de los quebraderos de cabeza para el Leyma Coruña. Tan sólo 22 cayeron en manos de los locales por los 43 que recogió Tenerife, situación que desniveló por completo la balanza del partido en la segunda mitad. Este cóctel negativo tuvo su último condimento mortal para los coruñeses con un paupérrimo acierto en el tiro desde el perímetro con un 3 de 22 y también en el tiro libre con 7 de 14. Porcentajes excesivamente grises para poder hacer frente al poderío de Tenerife, sobre todo con un tercer cuarto anotando tan sólo ocho puntos y un último en el que reciben 34, dos puntos más que toda la anotación de los canarios durante la primera parte.

Tras el partido, Diego Epifanio técnico del Leyma Coruña, mostró su lado más autocrítico demandando una mejor puesta en escena de su equipo, sobre todo cuando juega como local. “Siendo Básquet Coruña, nosotros en nuestra casa, tenemos que hacer lo máximo por no recibir 34 puntos en un cuarto. Evidentemente la calidad del rival es infinita, con una plantilla que lleva mucho tiempo jugando juntos con un entrenador que da exhibiciones tácticas cada fin de semana, pero nosotros nos tenemos que autoexigir más para no acabar un partido así delante de nuestro público. Nuestros porcentajes no ayudan, pero tenemos que ser más duros mentalmente. Si no estamos haciendo bien las cosas en ataque, no nos puede condicionar nuestra energía, ni nos tiene que condicionar nuestro rendimiento defensivo. Hay que felicitar a los chicos por un esfuerzo brutal en la primera parte, pero en la segunda no hemos estado cómodos porque todo lo bueno que hicimos hasta el descanso, no hemos sabido plasmarlo en la segunda mitad”, subrayó Epi tras la dolorosa derrota ante Tenerife, que hace caer la fortaleza del Leyma Coruña en el Coliseum.