El retorno de Ricky: así será el rol del base en su vuelta al Joventut veinte años después
Ricky Rubio regresa al que fue su hogar tras toda una vida de ausencia, pero también como un veterano de lujo con un currículum sensacional.


Ricky Rubio vuelve a casa. Y al baloncesto, claro. Ha sido, desde luego, uno de los anuncios más importantes del verano para el deporte español, ya que el base regresa al Joventut tras 20 años de ausencia y después de más de un año de ausencia. Es más, su último partido oficial fue el pasado 2 de junio de 2024 en el Palau Blaugrana, en el tercer partido de las semifinales de la Liga Endesa ante el Real Madrid. Un parón muy grande en el que se ha dedicado a intentar solventar sus problemas de salud mental y ha amagado con la retirada. Al final, tendremos más de su figura.
Una, por cierto, imprescindible para el baloncesto español. A su inabarcable lista de títulos y su demostrada experiencia en la NBA, hay que añadir que el jugador de 34 años lideró a España al oro en el Mundial de 2019 contra todo pronóstico, siendo además el MVP del torneo. Una hazaña considerable para alguien veterano, que regresa al que fue su hogar. Ese en el que debutó con 14 años, 11 meses y 24 días por obra y gracia de su entrenador de entonces, un Aíto García Reneses que apostó por él y que le llevó a lo más alto. Tras ello, llegaría la Euroliga de 2010 con el Barcelona. Y luego, más de una década en la NBA. Un currículum impresionante.
En el Joventut Ricky vivirá, presumiblemente, su última gran aventura como profesional. Y lo hará con una plantilla que le ha recibido con los brazos abiertos y con la que cuadrará a la perfección. Será un veterano de lujo incuestionable y un mentor eficaz para los más jóvenes, siendo además una de las extensiones en pista del entrenador, Daniel Miret, junto al otro gran veterano del equipo, un Ante Tomic que no se cansa de hacer del baloncesto un arte a pesar de ir camino de los 39 años. Esa será una conexión fabulosa en pista que permitirá a los aficionados de la Penya deleitarse con, seguro, más de una jugada para el recuerdo.
Pero Ricky, que se ha mostrado en una gran forma en pretemporada, también será el base titular y el responsable de que los verdinegros vayan ganando partidos. Con gente como Guillem Vives y Adam Hanga para ayudarle en la circulación del balón, los galones y el talento incuestionable del base serán algunos de los motivos para ver partidos del Joventut esta temporada. Y veremos hasta donde llega el equipo. De momento, lo que sabemos es que Ricky Rubio, el uno de los últimos representantes de la edad dorada del baloncesto español, vuelve a su hogar para una última gran aventura. Y menuda aventura. Una en la que los aficionados tendrán la oportunidad de volverle a ver jugar. Que no es poco.
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