El Granca puede con un rocoso Murcia

El Dreamland Gran Canaria derrotó a un rocoso UCAM Murcia, por 91-80, en un choque de alta intensidad física en el Gran Canaria Arena y lo superó en la clasificación, al colocarse en la cuarta plaza con 12 victorias y 7 derrotas. Los universitarios, sustentados en el parqué por los 15 puntos de Nemanja Radovic y los 19 de valoración de Howard Sant-Roos (8 puntos, 6 rebotes y 7 asistencias), se vieron finalmente superados por la dirección del francés Andrew Albicy, que firmó 16 puntos, 3 asistencias y 20 de valoración, secundado por el argentino Nico Brussino -otros 10 puntos y 18 de valoración- y por el estadounidense John Shurna -15 puntos y 75% en triples-.

A pesar del aporte físico que imponía el conjunto murciano en los primeros compases con Kurucs y Todorovic de actores principales, el equipo isleño fue poco a poco emergiendo en el marcador, merced a la polivalencia de Happ y Shurna, y especialmente por el acierto en la dirección de Albicy, que consiguió frenar el caudal ofensivo del exjugador amarillo Ennis, al mismo tiempo que se animaba en ataque para poner en vanguardia a los suyos (12-6).

Los hombres de Sito Alonso reaccionaron y ya en el ecuador del primer tiempo reducían las diferencias (13-12), pero fue un efímero repunte. Al momento Shurna, Pelos y Brussino estiraron el chicle (21-13). De poco sirvió el tiempo muerto de Alonso, ya que el Dreamland había cogido velocidad de crucero, hasta cerrar el primer parcial con 11 puntos de renta (27-16).

En el segundo acto, un triple de Artürs Kurucs y otro de Hakanson, combinado con un gancho de Radovic y un lanzamiento en la zona de Diagné, permitieron al UCAM enganchar un 0-10 de parcial e igualar la balanza (28-28). A partir de ahí se recrudeció el intercambio de canastas. Shurna tomaba los galones en las filas amarillas, mientras Radovic se llevaba al Murcia a la espalda -13 puntos del claretiano y 10 del universitario al descanso-. No obstante, tanto isleños como levantinos continuaron con la máxima igualdad hasta enfilar el túnel de vestuarios (44-44).

En la reanudación, Todorovic y Happ tomaron la batuta en ambas zonas, protagonizando un duelo de pívots que destilaba de manera nítida la igualdad que se vivía en el Gran Canaria Arena. El montenegrino ponía por delante al Murcia en el tercer cuarto (48-49), pero acto seguido reaccionaba Happ para dar oxígeno a los canarios (53-49). Una falta antideportiva de Rodions Kurucs sobre Brussino liberó al Granca de la espesura, ante la intensidad impuesta por un UCAM que no tardó en pedir una nueva parada táctica con 60-52 en el electrónico.

Fue entonces el turno de Lammers y Slaughter, que desactivaron la reacción de Diagne y Caupain (69-58). En esos momentos, Radovic se había quedado casi sin pólvora en vanguardia, Sant-Roos no encontraba fisuras para entrar por la zona y los árbitros empezaron a incrementar el número de faltas. Una batalla física que había mermado los guarismos en el parqué pero que había permitido al Gran Canaria plantarse en el último cuarto con 11 de ventaja (74-63).

La pizarra de Alonso logró reducir la derrama a cinco nada más empezar el último asalto (74-69), si bien el equipo insular consiguió contemporizar con el acierto en el tiro libre, manteniendo la hemorragia sobre la decena (79-69) a 4:46 para el desenlace. Con ese balsámico colchón, Pelos y Brussino se asomaron en los esquemas de Lakovic para consolidar el triunfo de los amarillos, haciendo estériles los esfuerzos finales de Hakanson o Sleva (91-80).

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