El Barça sufre para ganar al Girona en una magnífica actuación de Parker

Los inicios de temporada, también los de los proyectos nuevos, nunca son fáciles. Y es evidente que el Barça está en pretemporada, que ha jugado dos partidos en 24 horas y que todavía le queda mucho margen de mejora, pero el inicio ante el Girona es impropio de un equipo de su nivel. Los azulgranas encajaron un parcial de 0-19, deambularon sobre el parqué durante demasiados minutos y tuvieron que remar, y mucho, para ganar al Girona en los instantes finales. Destacó un inmenso Jabari Parker, Punter al final, en el mejor partido de Núñez hasta la fecha. Muchas cosas que corregir y poco tiempo para hacerlo, pero aún así el Barça logró ganar a un buen Girona. Y eso también dice mucho del equipo de Peñarroya.

El inicio del Barça fue un desastre. Encontraron bien a Willy en el dos para dos y llegaron a firmar un 0-7 de parcial, pero a partir de ahí, los siguientes minutos repartidos en dos cuartos, fueron un monólogo del Bàsquet Girona. Un buen partido de los de Katsikaris, uno nefasto de los de Peñarroya. El parcial, 19-0, simplemente sonrojante. Ni siquiera con un tiempo muerto lograron que el Girona dejara de encestar mates, bandejas y todo tipo de canastas fáciles. El Barça llegó siempre un segundo tarde, no punteó los tiros y no supo descifrar el bloqueo directo del Girona. O no cambiaron o llegaron tarde. Un desastre. Si le sumamos el mal porcentaje de tres (uno de nueve) y la alta intensidad del Girona llegamos al 30-13 con solo 12 minutos jugados.

Mejorar, evidentemente, no solo era el objetivo sino que era muy sencillo de lograr. Y lo hicieron, eso es innegable, pero tampoco de una manera rotunda. Empezaron a entrar los triples, sobre todo de Jabari Parker, pero se siguió viendo un Barça poco cohesionado sobre el parqué. Sergi Martínez le amargó la noche a Punter y tuvo que ser Laprovittola quien sumara para los azulgranas. El segundo período acabó igualado (22-22) pero la ventaja en el marcador global era gerundense (43-35) básicamente porque pese a la mejoría del Barça el Girona también siguió fino desde fuera.

Tardaron cinco minutos más los de Barcelona en ponerse por fin por delante (49-50) siendo, ahora sí, netamente superiores a su rival. La entrada de Vesely y Anderson dio un nuevo aire en defensa al equipo, complementado por unos exteriores (Punter y Núñez) mucho más ágiles en los cambios. El inexistente juego interior del Girona les obligó a tirar siempre de fuera y, con una defensa ya mucho más ajustada, las canastas dejaron de entrar. Un parcial de 0-10 con Jabari Parker de maestro de ceremonias les puso por delante. Pero el Girona no dejó de creer. Aprovechó un par de despistes (otros más) para endosarle un buen parcial y volverse a poner por delante. Iroegbu hizo mucho daño a los azulgranas (62-61).

El último cuarto, como toda la segunda mitad, estuvo igualado. Los triples de Juani Marcos mantuvieron a Girona por encima, las penetraciones de Laprovittola mantuvieron al Barça con opciones de estar en la final. El buen papel de Núñez en su mejor partido desde que viste de azulgrana, les brindó una pequeña ventaja. Punter, que apareció en el momento clave la apuntaló, pero cuando todo parecía decidido cinco puntos de Durham volvieron a apretar el partido (79-80). Jabari Parker, el mejor del partido de largo, se encargó de sellar la victoria. El Barça jugará la final de la Lliga Catalana este domingo (19:30) frente al Baxi Manresa.

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