El Andorra de Joan Plaza asalta Burgos con un latigazo final
El equipo burgalés dominaba el duelo, pero un parcial de 0-11 desniveló la balanza. Shannon Evans, decisivo con 27 puntos.
El Morabanc Andorra ganó este sábado en Burgos al San Pablo en un partido que dominaron los locales hasta el tramo final, cuando un parcial de 0-11 a favor de los visitantes, unido a las pérdidas de balón y la falta de ideas, decantó la balanza del lado de los de Joan Plaza.
Shannon Evans llevó la batuta anotadora -27 puntos- por parte de los visitantes con 31 de valoración. El San Pablo se queda con un 1-6 mientras que el Morabanc Andorra da un paso de gigante con la segunda victoria consecutiva para ponerse 3-4 en la clasificación de la Liga Endesa.
El encuentro comenzó con dominio burgalés, siguió con una fuerte reacción andorrana y llegó a un final decidido por detalles, en el que el acierto visitante terminó imponiéndose. Fue un duelo de contrastes, de momentos individuales determinantes y de un pulso táctico que se mantuvo vivo hasta los últimos minutos.
San Pablo firmó un primer cuarto de gran solidez ofensiva ante Andorra, pese a que el conjunto visitante comenzó mandando gracias a las primeras acciones de Pustovyi. A partir de ahí, el equipo burgalés impuso su ritmo, encontrando fluidez en ataque con un Dani Díez muy activo, el empuje constante de Meindl y la aportación exterior de Gudmundsson y Jhivvan Jackson.
Esa combinación permitió que los de Bruno Savignani pasaran de un inicio dubitativo a abrir una brecha sostenida en el marcador, alcanzando rentas claras que obligaron a Andorra a buscar alternativas.
El cuadro andorrano trató de mantenerse dentro del partido con momentos puntuales de Evans y Kuric, pero cada intento de acercarse encontraba la réplica burgalesa y en los instantes finales, Corbalán y Juan Rubio terminaron de consolidar el buen tramo local, llevando el marcador hasta un 25-17.
El segundo cuarto arrancó con un Andorra mucho más incisivo, decidido a reducir la renta burgalesa por medio de McKoy y Evans (25-22) y obligando a San Pablo a ajustar su defensa, aunque San Pablo cogió algo de aire (27-22), la insistencia de los de Joan Plaza les llevó a igualar el marcador (33-33).
San Pablo reaccionó con carácter, en unos minutos de intercambio de golpes hasta que De Sousa, con una acción potente cerca del aro, cerró el cuarto colocando el 44-42.
San Pablo entró al tercer cuarto tratando de recuperar el mando del partido, y lo consiguió apoyándose en la producción de Meindl, Gudmundsson y un Dani Díez cada vez más protagonista.
Aunque Andorra respondió con Kuric y Rubén Guerrero para acercarse, los burgaleses supieron golpear en los momentos clave, especialmente con un parcial que les permitió estirar el marcador hasta el 60-53.
La cuarta falta de Pustovyi marcó un punto de inflexión interior, dando más libertad a De Sousa y facilitando que el conjunto local mantuviera pequeñas ventajas pese a las acometidas visitantes.
Andorra, sin embargo, no soltó el pulso y entre McKoy, Rafa Luz y un Evans muy persistente, el cuadro visitante logró seguir vivo, evitando que San Pablo rompiera el partido, pero bajo la dirección de Raúl Neto, los burgaleses pudieron permitió a los burgaleses marcharse al último cuarto por delante (70-68).
San Pablo entró al último cuarto con la mínima ventaja con un Jackson que dio un impulso fundamental con cinco puntos casi consecutivos que abrieron una pequeña brecha, ampliada por un inspirado Dani Díez hasta el 79-73, pero con el San Pablo herido, Evans, Kuric y un dominante Pustovyi voltearon el escenario hasta el 84-87 y Okoye amplió la herida (84-89), y aunque Fischer respondió, las pérdidas y la falta de claridad local coincidieron con un cierre impecable del conjunto andorrano.
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