“Con el tiempo vamos a ver a un gran Carlos Alocén”

El base zaragozano Carlos Alocén no es jugador del Real Madrid desde este martes por la mañana y horas después se hizo oficial su fichaje por el Gran Canaria, donde espera relanzar su carrera tras una grave lesión que se complicó demasiado. El jugador afronta, asociado a su cambio de club, un verano clave para su futuro; aunque con la convicción de que “con el paso del tiempo” se va a ver “un gran Carlos Alocén”. Lo cree él, pero también lo piensan en el Madrid que ahora le deja salir en busca del protagonismo imprescindible que necesita para reencontrarse, para volver a ser aquel director de juego con chispa, talento, velocidad y confianza que fue elegido con el Zaragoza dos veces seguidas (2019 y 20) mejor joven de la ACB. Un premio en el que solo han repetido galardón Luka Doncic (2017 y 18) y ahora Jean Montero (2023 y 24). Emprende un camino que quizá un día le devuelva a la Casa Blanca.

Alocén tiene solo 23 años, aunque el Madrid lo fichara hace cinco, en el verano de 2019, del club de su ciudad, donde continuó cedido un curso más hasta su desembarco en la capital en 2020. En su segunda campaña a las órdenes de Pablo Laso, el 13 de febrero de 2022 se rompió en Málaga en un duelo de Liga el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. Lo que iba a ser una larga baja después de la operación, de 8 a 10 meses, se convirtió en una ausencia eterna por varias contratiempos no hechos públicas y que lo llevaron de nuevo al quirófano. Se perdió lo que restaba de temporada, la siguiente al completo y no regresó hasta un aplaudido 26 de noviembre de 2023 en el WiZink Center ante el Andorra, ahora con Chus Mateo en el banquillo, tras 21 meses, 13 días y 147 partidos sin jugar.

“La rodilla funciona y lo hará durante mucho tiempo”

Se le vio bien en su reaparición, valiente, con ganas, un buen punto de arranque; pero sí o sí el camino iba a ser duro. Casi dos años en el dique seco solo se olvidan después de otros cuantos meses más y bastantes partidos. En el Madrid, con todos los títulos en juego, a una velocidad de crucero altísima, no ha tenido los minutos que requería: un total de 305 (en 30 encuentros) entre ACB y Euroliga. Sin embargo, todavía lesionado el pasado verano, no podía irse a otro sitio cedido. Debía completar su rehabilitación, volver a jugar era lo único que importaba. La entidad merengue, además, acordó con él un cambio en las condiciones de su contrato y lo extendió por una temporada más, hasta junio de 2025. Ahora, ya restablecido (“me quedo con que la rodilla funciona y creo que lo va a hacer durante mucho tiempo”, asegura) es hora de volar, de buscar sus minutos para la recuperación definitiva, de ahí su salida (“comportamiento ejemplar y entrega”, expresa el club en el comunicado de despedida) y su fichaje por el Gran Canaria.

“Voy a mejorar, tengo que hacerlo. Me veo con margen”

Alocén encara el desafío con determinación, así transmitía sus sensaciones en su último mes en el Madrid: “Esta temporada ya he podido jugar. Mi vuelta me dio tiempo a imaginármela de varias formas, porque he tenido mucho tiempo para pensarlo, aunque el primer gran objetivo era regresar, solo eso, porque se me estaba haciendo demasiado largo. Sinceramente, me gustaría haber estado mejor, con un poco más de chispa, un pelín mejor físicamente. Con el paso del tiempo voy a mejorar, debo mejorar y tengo que hacerlo”.

El base maño explica sus planes inmediatos: “Tengo preparado un muy buen verano, creo que es clave para mi físico y para mi baloncesto, para mí en general. Lo tengo organizado para poder entrenarme y trabajar físicamente en eso que noto que me falta aún para estar al máximo nivel. Lo bueno es que me veo con margen de mejora. Con el tiempo vamos a ver un gran Carlos Alocén”.

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