Camps amarga a Mumbrú en su debut en la ACB

Salva Camps se llevó el triunfo de La Fonteta en su debut en la Liga Endesa. Así, sin más, ya suena muy bien. Pero además es que su equipo brilló e ilusionó a su afición en el arranque liguero ante un Valencia Basket con muchas caras nuevas pero que repite errores en la competición doméstica. El Girona basó su triunfo en la dirección de Quino Colom (8 puntos y 7 asistencias) y en el acierto de Goloman (16 puntos y 4 rebotes), Iroegbu (16 puntos) y Susinskas (15). En el Valencia, han cambiado demasiados jugadores para que las posesiones calientes se las volviera a tener que jugar Harper, un jugador que está en el club por la absurda norma del tanteo. Chris Jones, con 15 puntos y 4 asistencias, fue el mejor local aunque se percibió que aún le falta mucho para entender los movimientos de sus nuevos compañeros.

Que el Valencia Basket es un grupo nuevo que necesitará rodaje para alcanzar su velocidad de crucero es algo que no escapa a nadie. El primer cuarto cargó de razones esta teoría. Los taronjas cometieron demasiadas pérdidas y daba la sensación que nadie entendía a Jones, el que está llamado a ser la brújula del equipo. En el Girona, un extaronja Quino Colom llevaba el partido a su antojo y Sussinkas e Iroegbu martilleaban una defensa de ajustes local muy poco ajustada. Los de Mumbrú abusaban del triple aunque sin demasiado acierto. Del 17-17 se pasó a un 17-27 (min. 9) con Iroegbu en plan estelar. Un triple desde el córner y sobre la bocina de Harper recortaba la renta al final del primer acto.

Goloman, con cinco puntos seguidos en el inicio del segundo acto volvían a poner la máxima ventaja (23-33, min. 12) y muy nerviosa a La Fonteta que esperaban algo más de su equipo tras una ilusionante pretemporada. Pero justo en ese momento, el Valencia hizo click tras otro triple de Harper y un robo con mate incluido de Touré, en apenas segundos. La defensa local empezó a morder y el Girona no lo veía tan fácil, sobre todo porque el debutante Salva Camps había dado descanso a Colom. Dos triples seguidos de Jones y dos acciones repletas de coraje de Puerto, remontando la línea de fondo, le dieron la vuelta al marcador redondeando un parcial de 18-4, poniendo la máxima local hasta entonces (41-37, min. 19). Pero el Valencia volvió a desconectarse en los últimos 60 segundos antes del descanso, y Vila, de tres, e Iroegbu, con una bomba que cayó del cielo al límite de la posesión volvieron a poner en ventaja al Girona (41-42).

Colom rompió el duelo en el último cuarto

Y el nigeriano empezó el tercer cuarto tan enchufado como acabó el segundo. Dos triples consecutivos dejaron en nada el atisbo de presión local que iniciaron el cuarto con un triple de Robertson y una canasta de Jones. La defensa local subió un punto aunque Colom seguía encontrando las rendijas, anotando y asistiendo. Con Jovic dando minutos de calidad cinco días después de llegar, y Harper y Davies conectando, Valencia volvió a ponerse por delante. Pero el Girona parecía que dominaba más el partido. Un triple de Marcos, tras una jugada en la que movió muy bien el balón lo dejó 58-59, con un cuarto por jugar.

El Valencia empezó fuerte el periodo definitivo, con un parcial de 9-3, y puso la máxima en todo el partido, con dos libres de Davies (67-62, min. 32). Pero el Girona se revolvió y con un 3+1 de Goloman volvieron a coger la delantera. El marcador se convirtió en un yo-yo con un intercambio de canastas. Una de Jones puso el 75-75 y en ese mismo momento Quino Colom rompió el partido con dos asistencias clavadas a Sorolla y dos canastas propias. Con un 77-83, a falta de 1:38, el Girona lo tenía en su mano. El Valencia siguió remando y llevó el partido donde quería, con una bandeja vertiginosa de Harper (85-86), faltando 30 segundos. En un último ataque del Girona surrealista, donde el Valencia acabó recuperando el balón dos veces, Davies lanzó el balón arriba pero Marcos se adelantó y la antideportiva de Jones dio por finalizado el choque.