El 4 de diciembre de 2021, hace menos de dos semanas, Anthony Randolph volvió a jugar un partido 351 días después. El 18 de diciembre, en la pista del Olympiacos, el ala-pívot se rompió el tendón de Aquiles. Tras una travesía de casi un año, Randolph saltaba a la pista sustituyendo a Vukcevic con 2:57 por jugarse del primer cuarto. Un minuto después de estar sobre el parqué ya había anotado su primera canasta, un triple marca de la casa y a pase de Adam Hanga con el que el Madrid se puso nueve arriba (10-19). Los blancos ganaron el partido al Zaragoza. Y Randolph empezó con su retorno.

La operación del tendón de Aquiles retrasó la vuelta del ala-pívot, que cada vez cuenta con más minutos dentro del esquema de Pablo Laso. Se perdió el Clásico ante el Barcelona, en el que los de Laso cayeron derrotados en el Palau, pero regresó a la Euroliga contra el Alba Berlín. El jugador del Madrid empezó el partido de titular con Chus Mateo, el entrenador asistente de Pablo Laso, positivo, igual que Thomas Heurtel, por coronavirus. Y las cosas fueron fantásticas para el estadounidense.

Randolph diputó más de 21 minutos y anotó 13 puntos en una gran serie de tiro. Su serie de lanzamiento fue buena: 2 de 4 en tiros de 2, 1 de 4 en tiros de 3 y 6 de 6 desde la línea de personal. Además, Randolph atrapó 4 rebotes, dio 1 asistencias y solo perdió un balón. Y sumó 15 de valoración, solo superado por un Edy Tavares supremo (17 tantos sin fallo, 7 rebotes y 25 de valoración). Una buena carta de presentación para Randolhp, que ha vuelto fino a la competición y a buen seguro irá mejorando a medida que transcurran los partidos.

El Real Madrid está de dulce a pesar de la derrota ante el Barcelona en la Euroliga. Ocupa la primera posición de la Liga Endesa (12-1) por delante del eterno rival, y aguanta el tirón azulgrana en la Euroliga, donde tiene un récord de 12-3 por el 13-2 de los de Sarunas Jasikevicius. El siguiente en la clasificación, el Armani Milán, lleva 5 derrotas. Un buen bagaje para un equipo que recupera ahora auna pieza que ha sido fundamental en el esquema de Pablo Laso y que es uno de los jugadores más talentosos en ataque a nivel continental. Vuelve Anthony Randolph: de la tortura a la resurrección. Y el Madrid sonríe, claro. No es para menos.