El francotirador Nemanja Djurisic reta al Cáceres

La caída del Movistar Estudiantes a la LEB Oro trajo consigo lo que suelen traer estos descensos: una desbandada general de la plantilla que estuvo en ACB. Y es lógico. Ni los jugadores de élite quiere estar en Segunda ni los salarios son los mismos. Sin embargo, dentro de esta huida hacia adelante, hubo dos nombres (al margen de canteranos como Adams Sola) que se mantuvieron en el barco a la deriva: Edwin Jackson y Nemanja Djurisic.

“Sentí la decepción y el dolor de todo el club y la comunidad Estu por las derrotas de final de temporada y el descenso. Yo mismo me sentí así, tras haber estado muy a gusto durante todo el año con el cuerpo técnico, los compañeros y en la ciudad de Madrid. Así que después de unas semanas considerándolo, asumo el reto de volver para dar todo mi esfuerzo y trabajo duro hacia el objetivo de ganar la LEB Oro”, aseguró Djurisic cuando se anunció su continuidad en el Ramiro. Era el 11ª pieza del puzle de Jota Cuspinera.

Sin embargo, su presencia en cancha tardaría. Una lesión le dejó en el dique seco durante la pretemporada y durante las primeras cinco jornadas de la competición. Su debut, ante el Prat, fue discreto: 8 puntos con un 3 de 9 en tiros de campo que no alertaron al entrenador: “Es una metralleta desde el perímetro”, aseguraba Jota, que señalaba cierto nerviosismo en su jugador por el debut. Ante el TAU en Castelló siguió la misma línea, pero se notaba cositas: su conexión con Stoilov en el poste bajo era casi perfecta y era un ancla con el balón en las manos en ataque, dirigía y organizaba.

MVP ante el Almansa

Su explosión llegó en la última jornada frente al Almansa. Su segundo cuarto, con la segunda unidad, fue colosal: 20 puntos, 7 de 7 en tiros en campo (3/3 en triples) en tan solo 9:21 minutos sobre la cancha. “No es normal”, señaló Cuspinera tras la abultada victoria colegial (94-67). El internacional montenegrino acabó con 27 tantos y 30 créditos de valoración, que le valieron para ser el MVP de la jornada en la LEB Oro. Es el segundo estudiantil que recibe el premio en la categoría tras Lucas Faggiano y el segundo para el ala-pívot desde que aterrizó el pasado verano en el Ramiro: frente al Valencia Basket (24 puntos con un 5/5 desde el perímetro).

Partido ante el Cáceres 

Un galardón que lucirá este viernes en Cáceres (21:00, LaLigaSportsTV). El Movistar defenderá en Extremadura su liderato en solitario en la LEB Oro antes del parón de selecciones y con las bajas de Javier Beirán (gemelo) y Johnny Dee, que se lesionó la espalda en el primer minuto contra el Almansa. Edwin Jackson llega entre algodones por culpa de esa muñeca que le dejó fuera gran parte de la temporada pasada.

El Cáceres Patrimonio de la Humanidad, por su parte, llega con hambre después de enlazar tres derrotas seguidas que le han llevado a la 10ª plaza de la clasificación con un balance de 4-4. “A pesar de las últimas tres derrotas, estamos entrenando bien. Estoy contento. Estamos edificando este proyecto poquito a poco, más allá de victorias y derrotas. Es un equipo que va camino de ser solvente, pero tenemos que dar un paso al frente y es lo que intento hacer ver. Los jugadores saben que tienen que dar un poquito más”, asegura en declaraciones recogidas por El Periódico de Extremadura Roberto Blanco, entrenador de un conjunto extremeño que cuenta también con dos bajas: Manu Rodríguez (rotura fibrilar) y con Mateo Díaz (dedo). Vuelve Devin Schmidt, que antes de su parón por enfermedad promediaba 16 puntos. Anotó 18 ante el Leyma Coruña, que sufrió frente a los cacereños una de sus dos únicas derrotas del curso. Ojo.

“Es un equipo muy guerrero que no se va nunca de los partidos. No tienen mucha altura, pero eso les ayuda mucho en situaciones de cambios de defensa. Van a ser muy intensos, y no solo por filosofía de juego, sino porque van a intentar revertir sus últimas derrotas”, analiza Cuspinera. El Estu deberá seguir la misma línea que ante el Almansa y dejar que la mano de Djurisic vuelva calentarse.