El debate sobre quién es el mejor jugador de siempre, como su propia descripción indica, es eterno. Un acuerdo total es imposible. Hay tantas posibilidades como aficionados y tantos motivos para dudar como jugadores legendarios. La voz que más se hace escuchar es aquella que apunta a Michael Jordan; pero, de forma periódica, a modo de revisión obligatoria, la discusión vuelve a ponerse sobre la mesa. Gran parte de la culpa la tiene LeBron James. Uno es apodado, directamente, como The G.O.A.T; el otro, como The King. El primero sumó seis anillos, dejando a sus espaldas una trama inigualable, hasta el momento, en la historia del deporte: se fue ganando, volvió ganando y, por el camino, cambió la historia, yendo mucho más allá de lo deportivo. El segundo, con cuatro campeonatos en su currículum, sigue, a sus 36 años, siendo un firme candidato al MVP, con otro hilo argumental digno de Oscar: el del hijo pródigo que se marcha de casa reprobado y vuelve para otorgar lo prometido. 

Seleccionar una película o la otra es tan legítimo como posible, pero pocos están en mejor posición para hacerlo que Tyroon Lue. El entrenador de los Clippers, que actualmente ocupa la segunda posición de la conferencia Oeste con la franquicia angelina, compartió vestuario con Jordan en Washington y fue el director del anillo de LeBron en Cleveland. Recientemente, al ser preguntado por ello, se ha pronunciado al respecto, aunque dejando la balanza en el medio: "Son lo mismo, ambos querían ganar y harían cualquier cosa para ello. Pienso que hicieron un gran trabajo, ambos empujaron a sus equipos y generaron unión, haciendo que todos se sintieran parte de un todo. Uno podría pensar que, cuando se trata de jugadores que pueden ser más grandes que el propio juego, se pueden quedar en lo individual, pero fueron muy buenos para atraer a todos y hacer que se sintieran parte del grupo", argumenta.  

En su época de jugador, Lue consiguió sumar dos anillos, ambos en Los Ángeles Lakers, justo antes de coincidir con His Ariness sobre la pista, en unos Washington Wizards que acogieron los últimos compases de la prórroga del baile. Su andadura en los banquillos empezaría en el curso 2011-12, como asistente en los Boston Celtics. En la 2015-16, su primera como entrenador principal y la segunda en la disciplina de Cleveland, alcanzaría la gloria junto a LeBron, que culminaba su segundo intento tras el regreso a Ohio. Ahora, Kawhi Leonard, Paul George y compañía esperan que hacer lo propio bajo su batuta.