Mucho más que Paul y Booker: los Suns, a por todas en el Oeste
Brillante triunfo en Salt Lake City ante unos Jazz inferiores y 4-1 para los Suns, que no empezaban tan bien una temporada desde 2009. La amenaza es cada vez más real.
Todo el hype estaba justificado. No era difícil apostar por ello, después del perfecto despliegue de la temporada pasada y el sentido escrupulosamente sensato de sus movimientos en el mercado: los Suns están listos para competir en el Oeste. Llevan diez años (desde 2010) sin playoffs… pero también llevaban desde 2009 sin empezar 4-1 una temporada. Y ahí están después de ganar de forma muy convincente en Salt Lake City (95-106), un duelo de aspirantes a la zona noble del Oeste del que salieron escaldados (ahora 2-2) unos Jazz esta vez inferiores.
Los Suns han ganado tres partidos seguidos, cuatro ya en total, y cerraron 2020 con un 25-20 durante el año natural que es un 12-1 en sus últimos 13, desde el reinicio en Orlando con el 8-0 en la burbuja y este brillante 4-1. Y lo mejor es que están ganando sin fuegos artificiales ni explosiones de sus estrellas. No, los Suns de Monty Williams ganan porque son un equipo completo, equilibrado y bien pensado y trabajado: ganan porque son mejores que sus rivales. Con una muy buena defensa y un ataque con recursos, esta vez dominando a los Jazz y controlando todos los intentos de un rival que se vio 33-48 en el segundo cuarto, reaccionó y recibió un golpe ya mortal entre el tercer y el último parcial (70-91). Chris Paul se quedó en 11 puntos y 8 asistencias y Devin Booker estuvo bien pero no (para lo que es él) súper (25+7). Y DeAndre Ayton se cargó pronto de faltas (4 puntos, 9 rebotes). Pero no importó en un día fantástico de un lote de secundarios en el que Cameron Payne es un jugador definitivamente resucitado y en el que hay cuatro forwards para jugar de mil maneras: Saric, Jae Crowder (16+6) y dos jóvenes de un nivel excepcional, Mikal Bridges (16+6, su defensa habitual y triples en momentos clave) y Cam Johnson, que acabó con 10 puntos pero hizo daño en el 2-16 que dejó sin historia el último cuarto.
Los Jazz acumularon pérdidas y fallos, con Bogdanovic negado (0/5 en tiros) y Donovan Mitchell poco eficiente: 23 puntos, 23 tiros. Uno de los mejores equipos del Oeste en las últimas temporadas, desde luego de los más fiables en regular season, se enfrenta a nuevos retos para no perder su posición de privilegio (no digamos para ir más allá). Uno de ellos es Phoenix Suns, un equipo que es mucho más que hype y promesas. Es un aspirante muy real a devorar rivales y regresar, por fin y una década después, a los playoffs del Oeste.