2. Dennis Rodman
<b>- Años con Jordan:</b> 1995-1998<br> <b>- Estadísticas en temporada regular con Jordan:</b> 5,2 puntos, 15,3 rebotes, 5,5 rebotes ofensivos.<br> <b>- Estadísticas en playoffs con Jordan:</b> 5,4 puntos, 11,3 rebotes, 4,4 rebotes ofensivos.<br> <b>- Anillos con Jordan:</b> 3<br> <p>La quitaesencia del ala-pívot defensivo, Rodman fue el último gran fichaje que Jerry Krause aportó a los Bulls antes de desatar una guerra civil que ya había empezado años antes. Tras ser parte de los <i>Bad Boys</i> de los Pistons que consiguieron el anillo en 1989 y 1990, pasó por San Antonio (allí acompañó en la pintura a David Robinson) antes de aterrizar en Chicago, donde fue parte esencial del último <i>three peat</i> de los Bulls. En un inicio, se pensaba que su histriónico carácter iba a causar revuelo, pero la maestría de Jackson para manejar personalidades y la ayuda de un carácter fuerte como el de Jordan le permitieron ser útil. Siempre, eso sí, con ciertas concesiones, como el permiso de su entrenador para ir a Las Vegas entre el primer y segundo partido de las Finales de 1998 a jugar al póker y fumar cigarrillos, ya que en Salt Lake City <i>“no podía centrarse”</i>. Incansable reboteador, llegó a promediar 18,7 rebotes por partido en 1992, cuando consiguió 39 partidos por encima de los 20 rechaces. Llegó a Chicago con 34 años y un físico algo castigado, pero eso no le impidió conseguir medias de 14,9, 16,1 y 15 rebotes en las tres campañas que estuvo allí. Fue clave en con su defensa a Shaq en 1996, promediando 11,5 puntos y 15,8 rebotes en el <i>sweep</i> que inflingieron a los Magic. O’Neal se quedó en 10,8 rebotes y sumó más de 4 pérdidas en la serie, desmadejado por un hombre al que sacaba 15 centímetros (2,16 por 2,01).