COPA DE LA REINA | GERNIKA 80-ARASKI 83
Araski da la primera sorpresa en la Copa ante el Gernika
El amor propio de las vitorianas les llevó a la prórroga y a sentenciar con la actuación estelar de Tania Pérez y la aparición de Pardo. Wojta y Milic, muy solas en el Lointek.
Las fases finales de la Copa en baloncesto suelen deparar buenos cuartos. Otra cosa son las semifinales y el partido definitivo por el título. Y el Araski se agarró a esas sorpresas que a veces se dan para tachar a un Gernika que partía como favorito tras haber tuteado a los grandes en la Liga. Dos palos para las vizcaínas en poco tiempo: eliminación europea a manos del Valencia (esta lógica) y ante los vecinos del sur en el torneo del KO. Al Lointek le pesó mucho la presión de ser el claro candidato a la semifinal del sábado (presuntamente ante el anfitrión Perfumerías). Esa losa mental y la física de encarar su tercer torneo pesó poderosamente. Y en el bando vitoriano, las pupilas de Urieta demostraron tener mucho corazón. Las personales de Carrera y Seda les dejaron muy cortas bajo el aro, pero la buena gestión de los detalles les dio el premio.
Por ejemplo, casi siempre al salir de tiempo muerto o iniciar cuarto, lograban las verdes algo valioso. O Pardo, que solo logró cinco puntos, pero fueron una canasta en la zona y un triple que decantaron la balanza. Mario López tuvo un despiste cuando en un uno contra uno anotó la canasta del empate Barbee y quedaban dos segundos por jugar del tiempo reglamentario, pero no se dio cuenta, así que no empleó el tiempo muerto que aún le quedaba.
Fue una carrera de fondo, con el Araski mucho mejor puesto de inicio y amasando una ventaja de hasta 17 puntos. Impuso el deseo de lucha y la importancia de marcar el ritmo de juego y tomar las riendas en el marcador. El rebote era un hándicap enorme para el Lointek. Pero el Gernika nunca se rinde. Ni cuando se fue en Eurocup con 18 de ventaja y se los limó un impronunciable equipo húngaro de aspecto flojo.
Las vitorianas dominaban todas las facetas del juego. En el descanso llegó la reprimenda de Mario López y su equipo salió mucho más atento, con buena presión sobre las líneas de pase. Entre un físico físico superior y unas Wojta y Milic que imponían su talento, el tanteador se fue estrechando. El plantel verde fue perdiendo fluidez. Las de la villa foral dieron la vuelta al marcador (62-59), a falta de seis minutos para el final. Araski pagaba la acumulación de personales de jugadoras determinantes en la pintura, pero seguía aprovechando la sabiduría de Asurmendi, que tiró de galones para volver a recuperar el control del marcador para entrar en un toma y daca entre uno y otro equipo, que concluyó en empate (75-75) y, por tanto, en prórroga.
Y a pesar de que Araski tenía todo en contra, al perder por cinco faltas personales a sus torres, Carrera y Seda, no solo fue capaz de contrarrestar el poderío de Milic en el juego interior, sino que demostró el temple necesario para hacerse con la victoria y, con ella, lograr el pase a semifinales. El Gernika aún sintió más el agobio. Cuatro pérdidas, tres de ellas por obsesionarse buscando a su referencia bosnia, y otra por consumir los 24 segundos de posesión, zanjaron el debate en esos instantes en los que habitualmente sale ganador el que menos se equivoca,.