El Valencia Basket-Armani Milán, que se disputará este jueves a las 21:00, se jugará a puerta cerrada por el coronavirus. El club ha tomado esta medida siguiendo las ordenes de la Consellería de Salud de la Comunidad Valenciana. Hasta el último minuto, los taronjas han tratado de impedir este final, asegurando a las autoridades sanitarias que no habría ni aficionados ni periodistas italianos presentes en el pabellón y que se informaría a todos los asistentes de las medidas higiénicas recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Incluso, se propuso solo la entrada a La Fonteta de los 7.750 abonados del conjunto. Nada ha convencido al Gobierno valenciano.

“Una vez trasladada toda esta información y medidas a las autoridades sanitarias, la decisión de la Conselleria de Sanitat Universal i Salut Pública de la Generalitat Valenciana ha sido que el encuentro se celebre a puerta cerrada, y así se informa a los aficionados”, explica el club en un comunicado. “Con ello cumplimos dicha decisión de jugar el partido a puerta cerrada, aunque no guste la decisión, ya que con las medidas citadas el partido cumpliría con los requisitos para poder disputarse con público y bajo total y absoluta normalidad, que entendemos que es el objetivo que se pretendía, y no el de generar una sensación preocupante en este caso en concreto”.

Comunicado de la Euroliga

La Euroliga ha emitido un comunicado tras esta decisión. La máxima competición continental señala que el encuentro se disputará con el mínimo personal necesario, incluyendo "jugadores, cuerpo técnico, árbitros, miembros de la mesa y empleados de la televisión. De este modo se seguirán las mismas directrices que durante el Milán-Madrid de este martes.

El Darussafaka-Virtus, se jugará a puerta derrada

El partido Darussafaka Estambul-Virtus Bolonia, de la sexta jornada del Top 16 de la Eurocopa de baloncesto, se disputará mañana jueves en Belgrado a puerta cerrada, ha informado hoy la Euroliga.

El partido, inicialmente programado para hoy, fue suspendido el lunes por la imposibilidad del equipo italiano de entrar en Turquía a causa de las restricciones por el brote de coronavirus impuestas por el gobierno turco a personas que hayan estado en Italia en los 14 días previos al 2 de marzo.

La decisión de disputar el encuentro a puerta cerrada se ha tomado, añade la Euroliga, a solicitud del ministerio de Sanidad serbio para garantizar la seguridad de jugadores, entrenadores y árbitros y contribuir a evitar la propagación de la epidemia.