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EUROPEO SUB-18 (M) | ESPAÑA 57-53 TURQUÍA

Turkoglu a la FIBA: "Vuestros árbitros le robaron el oro a mi equipo"

El presidente de la federación turca escribió un mensaje en su cuenta de Twitter nada más acabar el encuentro en el que señalaba a los árbitros como responsables.

Turkoglu a la FIBA: "Vuestros árbitros le robaron el oro a mi equipo"

Hedo Turkoglu es uno de los grandes jugadores de la historia de Turquía y el actual presidente de la federación de su país. La resolución de la final del Europeo Sub-18, en la que Turquía cayó con España por 57-53 después de dominar el encuentro durante los primeros tres cuartos no pareció gustarle, a la vista del mensaje que dejó en su cuenta de Twitter.

El ex NBA, plata con Turquía en el Eurobasket de 2001 y en el Mundial de 2010, criticó duramente a la FIBA por la actuación de los tres árbitros del partido. Los colegiados Mazzani, de Italia, Kozlovskis, de Letonia, y Cici, de Alabania, fueron la diana de sus quejas con el siguiente comentario: "Es una vergüenza, FIBA. Realmente una vergüenza. Vuestros árbitros le robaron la medalla de oro a mi equipo. Es imperdonable, es vergonzosa la FIBA con estos arbitrajes”.

Más allá de los aciertos o errores que pudo haber durante el partido, que no decantaron nada hacia ninguno de los dos equipos, sí que hubo una jugada clave a pocos segundos del final. A 14 en concreto, cuando una jugada que pitaron como falta de Turquía pudo acabar en campo atrás de España. Los españoles sacaban de banda con 55-53 en el marcador. El balón lo recibió Javi García, que ante la presión de Ilyasoglu fue retrocediendo hasta quedar atrapado contra la línea de mitad de cancha. El turco metió la mano mientras el español botaba el balón y este acabó cruzando la divisoria. Ambos bases fueron a por el balón y en la lucha Ilyasoglu le hizo una falta clara a García.

El problema es que, como se pudo ver en la repetición, el balón se había marchado hacia el campo español porque había dado en la rodilla del base del Basket Zaragoza, no porque la hubiese tocado el del Anadolu Efes. Los árbitros mantuvieron la decisión y la posesión siguió en manos españolas, que a partir de ahí metieron dos tiros libres en dos jugadas consecutivas que sentenciaron la final.