HERBALIFE GRAN CANARIA-ANADOLU EFES
El Herbalife Gran Canaria se ahoga en su propia orilla
Los pupilos de Maldonado estuvieron ganando 87-77 a falta de 4 minutos, y acabó perdiendo por 90-94. Un triple de Simon, el mejor del Efes, reventó sus opciones de victoria.
Se las prometía muy felices el Herbalife Gran Canaria. No le faltaban razones, pues quedaban un par de minutos para acabar el partido y lo tenía totalmente controlado. Pero el Efes, que parecía desquiciado, olió el miedo que empezaron a destilar los jugadores locales y se lanzó a la yugular. Sin nada que perder, al final se llevó un partido que pudo ganar cualquiera. Dura derrota para el equipo insular, que continúa con su duro peregrinar en su estreno en la Euroliga.
Siendo una pesadilla cada uno de sus viajes en Euroliga hasta la fecha, le va la marcha al Herbalife Gran Canaria cuando juega en casa, como hoy ante el Efes, ese eterno aspirante al asalto del cielo continental, nunca concretado. Empezaron mandando los turcos, 2-7, pero rápidamente empató el Herbalife por medio de un triple de Evans, y otro de Tillie le daba un cierto respiro: 14-9. Encadenaba varias rachas positivas en ataque el equipo de Salva Maldonado, siempre más a gusto al calor de su público, pero nunca conseguía marcharse en el marcador. No lo permitió Dunston, que encestó para coronar un parcial de de 0-5 y darle de nuevo la ventaja a los suyos, 21-22, recuperando los locales la ventaja al final del primer acto: 25-24.
Como ante el CSKA, se vivió en el Gran Canaria Arena un partido estupendo de ver, con transiciones constantes, triples que iban y venían, varios mates incluso. Era, en definitiva, de esos duelos que tan poco gustan a los entrenadores, tan débiles las defensas en una y otra canasta. Sendos mates de Pasecniks, aprovechando las respectivas asistencias de Eriksson y Oliver, mantenían al Granca con ventaja, 31-26, motivando a Ataman a parar el partido cuando aún quedaban siete minutos exactos del segundo cuarto. El Efes se agarraba a Micic, 15 puntos al seguido, que puso a los suyos a tiro del Herbalife tras encadenar 5 puntos seguidos, 32-31, aprovechando incluso una falta antideportiva de Rabaseda cometida sobre él mismo.
Se llegó a poner el Herbalife siete puntos arriba, 43-36 y 50-43, pero la formación otomana seguía a lo suyo, picando piedra, acaso esperando su momento, con paciencia siempre ante el mundo de partido que quedaba por delante. Así, cuando parecía que los locales podían irse arriba al descanso con una ventaja más que considerable, un triple de Motum y una canasta sobre la bocina de Simon dejaron el marcador en un suspiro, 52-50, al final de los primeros 20 minutos de partido.
Retomó el partido un Efes mucho más metido, con 5 puntos seguidos del ex baskonista Beaubois para el 52-55. Surgió entonces el mejor Gran Canaria del partido, comandado por Strawberry, quien coronó desde el 6,75 un parcial de 13-2 a favor de los suyos que dejaba el marcador en 65-57. Otro triple del '24' amarillo mantenía a los suyos por delante, 70-64, pero los turcos no perdían comba merced a dos cómodos mates seguidos de Dunston.
Agazapado por ahí andaba Albert Oliver, quien, entre el final del tercer cuarto y el inicio del último, encadenó 10 puntos seguidos para mantener al Herbalife con ventaja, 80-72. Pese a que el partido comenzaba a tomar un claro cariz local, Moerman reventó el aro visitante para poner el 80-77 y obligar a Maldonado a poner pausa con un acertado tiempo muerto.
Será difícil que el Herbalife se vuelve a encontrar con semejantes opciones de ganar un partido de Euroliga. Con el Efes totalmente fuera del partido, 4 tiros libres seguidos de Báez, aprovechando además una antideportiva de Simon, más otro de Tillia dejaban el electrónico en 87-77. A poco que hicieran los locales, el partido estaba más que ganado. Pero ocurrió lo peor. Más que pequeño, el miedo a perder le hizo ver enano el aro visitante hasta que un tremendo triple del propio Simon dio forma a un 3-15 de parcial para poner el 90-92 con apenas 20 segundos por delante. En un último ataque mal seleccionado, los árbitros no vieron falta sobre Eriksson ni una clara sobre Báez en el rebote, y Micic ajustició desde el tiro libre.
No se puede permitir el Gran Canaria derrotas así si no quiere que lo que debería ser una fiesta, su primera participación en la Euroliga, se parezca cada vez más a una pesadilla. Hoy se ahogó en su propia orilla y suma ya 5 derrotas.