Garbajosa: "Ganar este Mundial sería más heroico que el de 2006"

Con la agenda echando humo, pero con la paz que da una isla, Jorge Garbajosa, presidente de la FEB, atiende a As en el corazón de Santa Cruz de Tenerife. El Mundial ha echado a andar en medio de una sensación apabullante de éxito organizativo que permite que la FEB ya piense en el futuro: Eurobasket 2023 en España. La FEB ya va a por él.

Ha repetido varias veces desde que está en Tenerife que este va a ser el Mundial femenino de la historia. ¿Por qué lo va a ser?

Primero porque es un mensaje ambicioso que he querido mandar. A la FIBA, a todos los fans, a las instituciones y los directivos que tanto han trabajado. Es un mensaje ambicioso, pero realista. Y si no afrontas con la máxima ambición un evento como un Mundial, mejor no hacerlo. Pero nos sentimos preparados y volcados con el proyecto femenino. Tenemos la oportunidad de que esto sea la punta del iceberg. Tener aquí a las mejores jugadoras del mundo en nuestro país es una herramienta perfecta para hacer crecer el baloncesto femenino. Ser la mejor Copa del Mundo de la historia significa que organizativamente no haya un solo fallo. Y no lo ha habido. Y no lo va a haber. Y luego, la repercusión que va a haber. El domingo vi llenos el Santiago Martín y el Quico Cabrera.

Vive usted dos Copas del Mundo. Una como presidente de la FEB y otro como anfitrión. ¿Cómo se compagina?

Con dos equipos brutales. Uno, el deportivo. Liderado por José Ignacio Hernández, Lucas Mondelo y todas las chicas. Otro, con José Montero, José Luis García, Víctor Charneco, David Calzado… Antes de empezar les reuní y les dije que serían días duros pero que nos colocarían en otro nivel. Esta Federación ha pasado muchos problemas y esto es una afirmación. Los problemas han quedado atrás y la gente lo percibe así pero para nosotros es una prueba de que esta FEB nueva está a un alto nivel.

Tanto en el Inspiration Women que organizan FEB y As como en el discurso inaugural del pasado viernes en el Auditorio mencionó varias veces el papel clave de Manuel Gómez, presidente de la Federación Canaria de baloncesto. ¿En algún momento corrió peligro el Mundial?

-A ver, no es que corriese peligro pero es un Mundial que requiere una inversión importante. No sólo económica, también logística. Poner de acuerdo a tanta gente no es fácil. No sentí que corriese peligro el Mundial pero ese pegamento que ha conseguido que todo funcionase ha sido Manolo Gómez. Cuando le nombré vicepresidente, sabíamos bien qué hacíamos. Sabíamos bien quién es Manolo y qué hace. Si el engranaje ha estado tan unido, es por Manolo.

Otro asunto. El formato exprés, diez días, y la sede única. Despertó críticas, pero aparentemente el éxito es aplastante.

Sin duda. Esto no es venir a Tenerife porque hace sol. La reflexión ha sido más profunda. Los Mundiales tienen costes y retornos. Y eso nos lo da Tenerife. Y además, FIBA vio aquí un ambiente en la Final Four de la Champions League que demostró que Tenerife es una isla de baloncesto. El venir a Tenerife, que alguno no lo había entendido, espero que ahora tenga todas las respuestas. Tenerife vive este Mundial con una pasión inusitada. Cabildo y Ayuntamiento nos han recibido de manera espectacular. Y las selecciones han visto que la afición está por el baloncesto más allá que por la Selección española. En Francia han visto que una mañana hay más de 2.000 personas viendo un partido contra Grecia a mediodía cuando en la playa se está muy bien… Y tener una sede única nos permite concentrar la atención aquí, en un punto. Creo que se ha mandado un mensaje deportivo muy potente y también de marca de país. Todos los inputs que hemos recogido son de que la apuesta ha sido acertadísima.

¿Es suficiente lo que está viendo como para plantearse organizar el Eurobasket femenino de 2023 o ser sede del Eurobasket masculino de 2021?

Por qué no. Hemos demostrado que el baloncesto femenino está creciendo. También es verdad que nos hemos olvidado de las palabras y nos estamos dedicando a los hechos. Y la apuesta por lo femenino es brutal. El proyecto femenino merece tanto la pena que no podemos permitirnos ni una semana de descanso. En 11 días tenemos un Open Day de basket femenino y será precedido por una presentación en Alcobendas. Los aficionados están descubriendo algo nuevo. No estaba en la clandestinidad pero creo que este será un empujón clave. Por eso, teníamos la idea de organizar un Eurobasket masculino pero igual hay que centrarlo en el femenino por la repercusión que está teniendo y que nos llena de satisfacción.

Resumiendo: España quiere organizar el Eurobasket de 2023.

Queremos grandes eventos. Pero eso no son opiniones, son estudios. Cada vez que hemos organizado un evento suben las licencias, los practicantes, los federados, las audiencias, la inversión… Y el trabajo de la base es indispensable. Podríamos vivir tranquilamente sin meternos en estos jaleos, pero queremos que el baloncesto crea y para eso es base la organización de eventos.

¿Tienen estimado algún impacto económico?

Lo que no os gusta es ser inexacto. Tener datos cuando este tipo de evento aún no se había organizado no es correcto. No podemos decir que va a haber seis euros por euro invertido. Pero sí puedo decir que ya está siendo un campeonato rentable. Tenemos ganas de que nos hagan un informe de retorno y mejorar las expectativas que hicimos pero este Mundial tiene dos retornos: económica directa, pero también de posicionamiento. Es apostar por un mundo, el del baloncesto femenino, que está creciendo. Le he pedido a mis directivos que sean líderes en el deporte femenino. No subirnos al carro, sino liderar el movimiento.

Pero sí se puede decir que no será deficitario.

Eso, por descontado. Lo que me gustaría es que sea lo más rentable que pueda ser.

Con la mano en el corazón y, si no, no la conteste. ¿Cambiaría el Mundial que con-quistó en Saitama en 2006 por el oro de las chicas en San Cristóbal de La Laguna el próximo domingo?

…(risas). Es que es una hipótesis surrealista. No está vinculado. Creo que lo de 2006 fue una heroicidad. Ganar este Mundial sería más heroico. Creo que la diferencia de Estados Unidos con el resto es gigantesca pero es que aparte hablamos de una Australia con una de las mejores jugadores del mundo… Conseguir medalla en este Mundial sería heroico.

Ha querido hacerse la foto para esta entrevista en el Quico Cabrera de Santa Cruz, que estaba para cerrar y va a quedar como legado…

Cuando hablamos de retorno, hablamos de eso. En el marco de este Mundial se ha podido acometer la reforma de un pabellón histórico pero por el que había pasado el tiempo y era vetusto. Ahora estará como instalación funcional al servicio de todos los ciudadanos. Para mí, el día que hicimos la visita final de obra el 5 de septiembre, yo me emocioné. Cuando nos vayamos de aquí y volvamos dentro de equis años, será un orgullo ver cómo la gente disfruta la instalación.

¿Es verdad que las chicas de la Selección ya ganan el mismo dinero que los chicos en la FEB en premios?

Absolutamente igual. Los jugadores perciben una serie de cantidades por su asistencia a la Selección. Ni mucho menos vienen por eso pero cuando consiguen unos objetivos, tienen unos premios igualitarios.

Sorprendió la ausencia del secretario general de FIBA, Patrick Baumann, en la gala inaugural del Mundial. ¿Cómo calificaría la relación FEB-FIBA en este instante?

Al final, piensa que el presidente la Federación Internacional (Horacio Muratore) está aquí de principio a final del campeonato. Han estado miembros del Comité Ejecutivo y que haya cuatro o cinco miembros del board de FIBA en España es un respaldo.

Pero no me regatee. ¿Cuál es la relación FIBA-FEB?

Nosotros somos muy leales y muy respetuosos con las casas de las que somos parte. Tanto al CSD como a la FIBA. Y siempre vamos de la mano con las casas de las que somos parte. Tenemos una buena relación con ellos. Que en momentos puntuales estemos más o menos de acuerdo en algo es absolutamente normal y por eso son buenos los debates. Eso te hace mejorar y crecer. Pero nosotros tenemos buena relación con FIBA, CSD y COE. Alejandro Blanco estuvo aquí en el partido ante Puerto Rico.

La ACB discutió el lunes pasado un nuevo formato .No se votó pero tiene 18 clubes. ¿La FEB lo considera satisfactorio por el hecho de que no reduzca equipos?

No es que nos vaya bien o no. La ACB tiene autonomía. Valoro el esfuerzo que hacen muchos clubes y del propio presidente para encontrar soluciones creativas. No es que tenga que agradecerlo pero lo agradezco. Y me parece una posición correcta ir a 18 equipos porque eso significa 18 ciudades representadas. Más jugadores, más entrenadores, más árbitros, más visibilidad. Más atención durante el año. Luego las fórmulas son opinables. Pero el esfuerzo por encontrar vías de consenso son encomiables.

Cierro. ¿Qué palabras le gustaría decir en la clausura?

Me gustaría decir que hemos cumplido el reto y el reto, es sencillo decirlo pero complicado hacerlo, es organizar la mejor Copa del mundo femenina de la historia. Y estamos en el camino. Tengo una sensación de orden. No hay problemas. Y cuando no hay problemas es que todo va como estaba previsto. Queremos mandar al mundo un mensaje: que España vuelve a estar en la élite organizativa.