La Selección arranca con buen pie el camino hacia el Mundial
Pese a las bajas y con un gran ambiente en Valencia, el equipo de Mondelo venció a Bélgica con una gran defensa y hoy se mide a Francia.
El óxido saltó por los aires en La Fonteta. España, que por fin avista la recta final hacia Mundial de Tenerife (y la primera gran batalla en casa desde el Preolímpico de 2008 en Madrid), llevaba sin jugar desde los amistosos contra Japón a principios de julio. Y después de una semana de carga física en L’Alquería, tardó en entrar en calor contra Bélgica (58-46 final), bronce en el último Europeo en el que España fue oro (la plata, Francia, había ganado antes en la misma pista a Letonia y jugará hoy sábado contra España): 12-23 en el primer cuarto tras una indigesta ensalada de pérdidas en ataque y desconexiones en defensa.
En el segundo cuarto apareció la España de Mondelo: 22-4 de parcial con un 14-0 en más de seis minutos (26-23) y partido de cara al descanso (34-27). Partido, por cierto, con bajas: en España no jugaron Anna Cruz, Silvia Domínguez, Alba Torrens, Bea Sánchez y la recién aterrizada Astou Ndour. Bélgica no contó con su estrella histórica, Ann Wauters, pero sí con Emma Meesseman, una de las referentes de su gran generación del 93 y una de las grandes figuras del panorama europeo. Pero una que siempre sufre contra España, especialmente ante la defensa, por experiencia y dureza, de Laura Nicholls. Esta vez, además, enseñó sus fascinantes fundamentos pero estuvo imprecisa (10 puntos, 4/16 en tiros) a pesar de que Bélgica llegaba a este Torneo de Valencia con dos semanas de preparación: más rodada que España.
A partir de ese reventón del segundo cuarto, España manejó el partido con cierta comodidad gracias a la defensa: 23 puntos de las belgas en el primer cuarto, 23 totales en los otros treinta minutos. Controló las pérdidas, y al estilo Mondelo, metió muchas manos en las líneas de pase para forzar errores de las belgas. Sin algunas jugadoras esenciales, brillaron, con Laia Palau al mando de las operaciones (5 asistencias), Belén Arrojo (14 puntos, 3 rebotes) y Laura Gil (11 puntos). Muy buen ambiente en Valencia y buen triunfo para un equipo con, de eso no hay duda, su idea y sus conceptos muy claros y muy trabajados. Son, de hecho, cinco medallas seguidas desde 2013 (dos oros, dos platas y un bronce). El camino hacia la sexta acaba de comenzar con esta victoria ante Bélgica. Y ahora (sábado, 21:00, Teledeporte), Francia.
Contra Francia, un clásico del baloncesto europeo
Porque hoy sábado se miden Francia y España, las dos grandes potencias del basket femenino continental acostumbradas a cruzarse cuando las cosas se ponen serias. Hace poco más de un año, en el Eurobasket de la República Checa, la Selección se colgó su tercer oro, el segundo en cinco años, tras barrer a Francia en la final (71-55).
Dos años antes, en el Europeo de 2015, Gruda, Dumerc y compañía apartaron a la Selección de la final y ésta tuvo que conformarse con el bronce. Francia se vengó tras lo ocurrido en 2013. En aquel campeonato Sancho Lyttle calló Orchies con una canasta a falta de 7 segundos (70-69). Como ocurriría dos años después en el Europeo de chicos, España mandó en el Eurobasket de Francia.
El balance en la última década favorece a las francesas (4-3), pero los tres triunfos de la Selección terminaron con una medalla: dos oros europeos (2013 y 2017) y el bronce de Chequia en 2010. España hizo historia aquel año al clasificarse para semifinales por primera vez en un partido loco. Francia controló el partido, pero Valdemoro forzó la prórroga sobre la bocina y España, que perdió ante EE UU en semifinales, acabó colgándose el bronce.