Mindaugas Spokas, secretario general de la Federación de Baloncesto de Lituania, habló de "la sombra" de la medalla de oro conseguida por Eslovenia en el Eurobasket del pasado mes. "Su juego fue bonito y tuvieron un fantástico equipo, pero no hay que olvidar que el entrenador y uno de los jugadores que lideraron al equipo no son eslovenos. Creo que esto arroja una sombra", dijo Spokas en declaraciones recogidas por 15min.lt.

Randolph fue el cuarto máximo anotador de Eslovenia (11,7 puntos) y el segundo máximo reboteador de su selección (5,2). "Con todo el respeto para Randolph, no tiene nada que ver con el baloncesto esloveno. Kokoskov es serbio, así que tampoco tiene nada que ver con el baloncesto esloveno. Su victoria sería más dulce si no hubieran tenido jugadores nacionalizados. Compartimos la idea de los serbios (Djorjevic siempre ha dicho que no llamará a jugadores que no sean serbios: "Es un insulto para Europa. Yo cancelaría esos pasaportes ridículos"), pero Eslovenia hizo una excepción: naturalizó a un jugador de baloncesto que les ayudó a convertirse en campeones de Europa".